La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) pidió a las autoridades de Venezuela detener una campaña difamatoria contra directivos del diario Notitarde, a la que calificó de “maliciosa maniobra de desprestigio”, instigada por legisladores nacionales y estatales del oficialismo de ese país.
Esta semana, varios paseos públicos de la ciudad de Valencia, en el estado de Carabobo, amanecieron con carteles y pancartas anónimas en los que se acusaba al diario y a sus directivos de estar financiados por el narcotráfico.
La campaña contra Notitarde se inició después que el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), denunció que el diario tenía vínculos con la familia Makled, cuyos miembros están siendo procesados por narcotráfico.
Diputados del PSUV del estado de Carabobo y concejales oficialistas de la ciudad de Valencia, se hicieron eco de las denuncias de Cabello ante el Congreso nacional. Acusaron a los directivos de Notitarde por publicar publicidad política que hace cuatro años atrás contrató Abdalá Makled, candidato a la alcaldía de Valencia, hermano de Walid Makled, quien hace poco fue extraditado desde Colombia y procesado por narcotráfico. También acusan al diario de haber divulgado publicidad de una empresa del grupo Makled, entre 2007 y 2008.
El presidente editorial de Notitarde, Ricardo Degwitz, explicó a la SIP que al momento de la contratación de la publicidad no existía impedimento judicial alguno para una relación contractual con el grupo Makled. Además, en el caso de Abdalá Makled, dijo que su candidatura estaba autorizada por la Consejo Nacional Electoral, “por lo que no corresponde a ningún medio violar normativa alguna de ese organismo”.
El presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e información de la SIP, Gustavo Mohme, mostró su sorpresa por los ataques contra Notitarde “tendientes a minimizar la credibilidad de un medio que ha dado muestras de pluralidad y diversidad editorial”.
Mohme, director del diario peruano La República, dijo que “estamos frente a una maliciosa maniobra de desprestigio, cuando vemos que se trata de asociar la buena fe que tuvo un diario en el pasado, con el proceso judicial que se le sigue a una familia en el presente”.
Además de las acusaciones públicas, el PSUV estatal, solicitó la semana pasada a la Fiscalía General de la República que inicie una investigación en contra de la directiva de Notitarde, por sus presuntos vínculos con el narcotraficante Walid Makled.
Representantes de agrupaciones académicas, sindicatos, organizaciones civiles y trabajadores del medio, han rechazado y se vienen manifestando públicamente contra las acusaciones de los legisladores.
Walid Makled también es señalado como presunto autor intelectual del asesinato del periodista Orel Sambrano, del semanario ABC de Valencia y articulista de Notitarde, ocurrido el 16 de enero 2009.
