A Stanislas Wawrinka solo le faltaba un Gran Slam para conseguir su despegue y así fue. El suizo se ha consagrado campeón del Abierto de Australia al vencer nada menos que a Rafael Nadal, número 1 del mundo en el ránking de la ATP, con lo que deja los triunfos en categoría 250 y pasa a triunfar por todo lo alto en la alta competición tenística.
Wawrinka nació el 28 de marzo de 1985 en la ciudad suiza de Lausana. Su primer triunfo en el tenis ha sido un Roland Garros, en el año 2003, en la categoría junior. En más, la carrera del suizo iría ascendiendo poco a poco, al triunfar en torneos como los de Casablanca y Umag, que le dieron un mayor vuelo a su carrera como tenista.
El suizo ha vencido nada menos que a Novak Djokovic, a David Ferrer y esta vez a Rafael Nadal; con esto, y aunque ya desde 2013 está entre los 10 mejores tenistas del mundo, se mete a la élite del tenis mundial donde empieza a escribir una historia ascendente llena de triunfos y reconocimientos por el mundo del deporte de la raqueta.
Juega muy bien en diferentes superficies, sobre todo en tierra batida y pista dura. Su revés es considerado como uno de los más poderosos del tenis y su rapidez es una característica propia del suizo que, en un Gran Slam, antes de ganar el de Australia este año, llegó hasta cuartos de final del Abierto de los Estados Unidos en 2010 y hasta cuartos también del Abierto de Australia en 2011.
Este año le tocó el triunfo absoluto y ya se habla de una destacada carrera que irá cada vez más en ascenso; seguro será así, talento le sobra.EFE