Unas 800 hormigas han sido enviadas a la Estación Espacial Internacional (ISS) para enseñar a los científicos cómo construir robots que interactúan entre sí en condiciones de poca gravedad.
Del tamaño de una tableta fueron enviadas al espacio en la cápsula Cygnus, ocho colonias de las llamadas hormigas de pavimento, según "Daily Mail".
Los expertos observarán cómo las hormigas se mueven de acuerdo a patrones interiorizados, de tal forma que pueden saber cuántas hay cerca palpando a su alrededor con las antenas o usando su sentido de olfato.
Pero en la llamada microgravedad del espacio, las reglas de las hormigas se confunden, viéndose obligadas a generar un nuevo conjunto de patrones para poder trabajar juntos.
Estos principios flexibles podrían adaptarse en la programación de robots que trabajen juntos de la misma forma para llevar a cabo tareas como la búsqueda en edificios en llamas, refiere Daily Mail.
El experimento cuenta con cámaras de video que enviarán a la Tierra imágenes de las hormigas del pavimento.
NASA.GOV