Representantes de países de África, Asia y Sudamérica, que albergan las tres mayores cuencas forestales tropicales del planeta acordaron colaborar en la lucha contra la deforestación y pidieron ayuda para ello a la comunidad internacional.
En una cumbre celebrada en Brazzaville, capital de la República Democrática del Congo, esos enviados dijeron que los esfuerzos medioambientales benefician a todo el mundo en asuntos como el cambio climático.
Sin embargo señalaron que eso tiene un costo para esos países, que no venden la madera de sus bosques y no deforestan zonas para la agricultura.
El presidente de la República Democrática del Congo, Denis Sassou N'Guesso anunció que su país plantará árboles en un millón de hectáreas en los próximos diez años.
Uno de los corresponsales de la BBC en la capital del país africano señaló que sólo la mitad de los 35 países participantes enviaron emisarios de alto nivel por lo que se pospuso el intento de crear un órgano de cooperación permanente.