La menopausia no parece aumentar el riesgo de enfermedad cardiaca fatal, al contrario de lo que se pensaba hasta ahora. Así lo sugiere un trabajo de la Universidad Johns Hopkins (EE.UU.) que señala que los datos de su investigación muestran que es el envejecimiento por sí solo y no el impacto hormonal de la menopausia, lo que explicaría el mayor número de muertes en mujeres de edad avanzada.
Los resultados, publicados en British Medical Journal, podrían tener implicaciones a la hora de valorar la salud cardiovascular de las mujeres premenopáusicas. «Nuestros datos muestran que no hay una mayor tasa de ataque cardíaco fatal después de la menopausia», afirma Dhananjay Vaidya, director del estudio. «Lo que ocurre es el envejecimiento propio de las células del corazón y las arterias, como ocurre en cualquier otro tejido del cuerpo, y es por eso que las mujeres pueden ser más susceptibles a un ataque cardiaco».
Similar a población general
El equipo de Vaidya ha analizado las estadísticas de mortalidad para las personas nacidas en Inglaterra, Gales y EE.UU. entre 1916 y 1945. Los investigadores analizaron grupos similares de personas a medida que envejecían y descubrieron que, en el momento de la menopausia, no se observó un incremento en las tasas de mortalidad femenina por encima de la curva de equilibrio que se espera de envejecimiento.
Los investigadores también encontraron que el número de mujeres que mueren cada año por enfermedades del corazón aumenta de forma exponencial en un 8% anual. La curva de la muerte de tasa de estadística se mantiene constante durante toda la vida. La mortalidad absoluta -el número real de muertes- se incrementa en todas las edades, sin cambios brusco durante la menopausia.
En varones
Resultados sorprendentes arrojó el estudio en varones. Desde hace tiempo se sabe que los hombres tienen un riesgo mayor de mortalidad por enfermedad cardíaca a partir de una edad mucho más temprana que las mujeres. Según Vaidya, la curva de mortalidad para los hombres menores de 45 años, en realidad aumenta un 30% al año, y sólo se reduce después de esa edad aproximadamente en un 5% al año.
Resultados sorprendentes arrojó el estudio en varones. Desde hace tiempo se sabe que los hombres tienen un riesgo mayor de mortalidad por enfermedad cardíaca a partir de una edad mucho más temprana que las mujeres. Según Vaidya, la curva de mortalidad para los hombres menores de 45 años, en realidad aumenta un 30% al año, y sólo se reduce después de esa edad aproximadamente en un 5% al año.
Los datos sugieren que puede existir un evento biológico que provoca un deterioro en el corazón de los varones más jóvenes. «En lugar de buscar en la menopausia, lo que deberíamos estar analizando es lo que está sucediendo biológicamente a los hombres. No tenemos una buena respuesta».
Los investigadores también encontraron buenas noticias: debido a una mejor nutrición, estilo de vida, a la atención preventiva, medicamentos y otros tratamientos de las enfermedades del corazón el riesgo de mortalidad cardiaca iba disminuyendo en cada cohorte analizada de forma sucesiva con los años.
A modo de conclusión, Vaidya afirma que los médicos deben evaluar la salud cardiovascular en las mujeres desde una temprana edad: «Se debe prestar especial atención a la salud del corazón en las mujeres debido a su riesgo durante toda su vida y no sólo después de la menopausia».