Ya está todo listo para que se abra el telón del Centro de Artes Omar Carreño, en la Asunción, dando paso a la magia, el color y la fantasía del Cascanueces, pieza obligada en los teatros del mundo entero que se ha convertido en una tradición para el público neoespartano. El Cascanueces, de Ballet de la Mar ha crecido a lo largo de 12 años hasta posicionarse como uno de los más importantes a nivel nacional.
Constancia y disciplina son fundamentales para lograr los resultados que se verán en escena durante las 12 funciones que se presentarán al público en esta temporada y en las cuales se alternarán más de 700 alumnos. Como en años anteriores el público podrá disfrutar de dos versiones de este ballet, este año con una producción renovada que incluye efectos especiales.
El programa pre profesional realiza un Cascanueces de corte profesional tal como lo haría una compañía, con la obra completa en 3 actos. El resto del alumnado presenta la Suite del Cascanueces, con un montaje coreografiado especialmente para los más pequeños de la casa.
Cascanueces con sello margariteño
Con gran orgullo, la maestra Martha Ildiko mira hacia atrás y comparte los detalles de la evolución de esta gran producción: ”El primer Cascanueces fue el año 2004 luego de un taller de formación de un año. En el 2007 nace la Fundación Ballet de la Mar y el Cascanueces tenía 70 personas en escena. Hoy en día hacemos temporadas completas de 12 funciones donde participan más de 700 personas”.
Explica Ildiko que para la selección de los elencos, el alumnado pasa por un proceso de audiciones y son elegidos para cada papel quienes tengan la capacidad técnica y artística para interpretarlo. Igualmente en el caso de la Suite, la academia cuenta con 6 niveles de Kinder Ballet y a cada nivel le toca un papel diferente cada año. Los papeles de solistas los interpretan los bailarines que hayan pasado su audición.
Cabe destacar que esta producción está hecha totalmente por talento local, por un equipo multidisciplinario que se ha formado y ha crecido en las filas de Ballet de la Mar. Los telones son hechos por un Wilson Espinoza, ex alumno de la escuela. Algunos representantes se han incorporado a la producción y elaboración de vestuarios, tal es el caso de Jesús Valdivieso quien elabora la utilería y además hace las zapatillas de media punta y punta. Gladys Rade confecciona los tutús, Jackie Palenzuela los vestuarios, Yoleida Valdivieso, Jackie Palenzuela y Auristela di Camilo elaboran los tocados. El bailarín Juan Carlos Delgado, se encarga de los movimientos de tramoya y Eduardo Jiménez es del equipo técnico, encargado de la instalación de iluminación.
En cuanto a la coreografía, dijo Martha Ildiko: “Es mi visión del Cascanueces. En la escena de la fiesta, como un regalo a mi mamá rememoré las fiestas de navidad de mi casa, en las cuales los niños estábamos afuera lanzando fuegos artificiales mientras los invitados estaban en la casa decorando el arbolito. Cuando regresábamos, encontrábamos el árbol decorado y con todos los regalos”
El resto del ballet es una adaptación, mi versión es más corta que la original, sin embargo lo que se mantiene como repertorio son los Pas de Deux, tanto el rosado como el blanco, los cuales tienen una mínima adaptación pero son parte del repertorio clásico universal.
Las funciones
Las funciones serán a partir del jueves 19 de noviembre hasta el domingo 29 de noviembre. Los jueves y viernes a las 7:00 pm se presentará la Suite del Cascanueces. Los sábados y domingos a las 11:00 am se presentará la Suite y a las 3:00 pm el Cascanueces completo. Las entradas están a la venta en la sede principal de Ballet de la Mar, ubicada en la urbanización Jorge Coll a un costo de: Bs. 600 por persona.
