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lunes, 20 de junio de 2011

El cementerio viejo enterrado entre monte, inseguridad y animales

En medio de un recorrido realizado por el cementerio viejo, tinaquilleros manifestaron su descontento por el mal estado en que se encuentra el lugar donde descansan sus seres queridos.

Los deudos que aprovecharon el Día del Padre para visitar a quines han desaparecido físicamente, dejaron saber que en el campo santo en vez de conseguir paz, reinan los actos delictivos por falta de funcionarios de seguridad que resguarden el sitio “no podemos poner nada porque se lo llevan, partieron un vidrio y se llavaron unos santos que habíamos puesto, además de los borrachos que duermen sobre las tumbas” expresó Norca Gill.

Por su parte, Auxiliadora Benítez, vocera principal del Consejo Comunal de Pueblo Nuevo, comunidad aledaña al sitio, manifestó que muchas personas se cohíben de visitar a sus muertos por miedo a ser robados o a que les pique un animal.

“Parece una selva, lo que sobra es monte y de vez en cuando viene una cuadrilla pero no limpian bien, los zancudos y las culebras están a la orden del día, hay que venir en pantalones, no es justo que el cementerio se encuentre en está situación y menos en fechas como esta, el hecho de que ya no estén con nosotros no significa que los vayamos a olvidar y a tener en estas condiciones”

Finalmente, hicieron un llamado al gobierno local y al director de servicios públicos para que le haga un cariñito, además de que envíen funcionarios policiales y eviten hechos delictivos y de igual manera, no permitan que personas inescrupulosas realicen actos de santería irrespetando la paz que necesitan los que allí reposan.