La selección española resolvió el primer amistoso antes de la Copa Confederaciones con un pobre e insípido triunfo ante la débil Haití que no pasará precisamante a la historia. En Miami, con calor, bochorno y apenas 5.000 espectadores en las gradas, los de Vicente del Bosque, muy superiores a su rival pese a lo apretado del resultado, pusieron pronto un 2-0 por medio de Cazorla y Cesc, algo que auguraba una goleada final. Sin embargo, el partido fue decayendo y de una primera parte digna se pasó a una segunda horrible y tediosa.
La anécdota fue que los haitianos, sin presencia ofensiva en casi todo el partido, lograron un gol por medio de Guerrier que animó algo a los escasos espectadores que acudieron al estadio. España jugará su segundo amistoso la madrugada del martes al miércoles en Nueva York ante Irlanda.
El inicio conllevaba cierto morbo por conocer cuál iba ser la decisión de Vicente del Bosque respecto a la titularidad en la portería. La inactividad de Iker Casillas en el Real Madrid, por obra y gracia de Mourinho, hacía pensar que quizás se decidiera por Víctor Valdés, pero el técnico tiró de lógica evitando problema alguno y escogió al meta que ha llevado a España a ser campeona de Europa y del Mundo. E incluso en la segunda mitad, prefirió a Reina antes que aVíctor, que no jugó ni un minuto.
Lo anecdótico de la puesta en escena del combinado nacional fue la presencia de un único jugador del FC Barcelona en el once inicial, concretamente Cesc Fábregas, cuando los azulgrana suelen ser la base de este equipo. No fue de falso '9' como utilizó Del Bosque a Cesc. El entrenador prefirió poner a Fernando Torres como hombre de referencia en ataque.
Fue el 'Niño' precisamente el que pudo lograr un gol de bandera en el minuto 6, tras un buen centro de Navas que remató fuera con una estética media chilena. España llevaba todo el peso del partido y encontró portería muy pronto. En el minuto 7, Santi Cazorla disparó con su zurda desde fuera del área y colocó el balón junto al palo izquierdo de la meta de Montrevil.
La superioridad de 'La Roja' se hacía más que evidente a la hora de la circulación de balón. España no tenía problema alguno para jugar al primer toque sin prácticamente presión alguna por parte de su rival. El calor y bochorno de Miami impedía, eso sí, que el choque tuviera mayor intensidad física.
La banda derecha de Navas insistía una y otra vez, pero las mayores jugadas de peligro se crearon en el otro lado. A los 18 minutos Javi Martínez envió un flojo remate al exterior de la red y sólo uno después, un preciso centro de Mata era cabeceado en globo por Cesc por encima del portero de Haití. Era el 2-0.
Además de la profundidad de Navas y Azpilicueta, los continuos movimientos de Cesc y la conexión entre líneas entre Mata y Cazorla le creaban muchos problemas a Haití, selección completamente abrumada y que sólo había dado señales de vida en ataque con un disparo que se marchó a córner tras pegar en un defensa.
El balón rondaba siempre el área de Montrevil, aunque el juego no era especialmente vivo. Los futbolistas de 'La Roja' tocaban y tocaban esperando el momento adecuado. Navas lo intentó en el 40 con un disparo que despejó el meta haitiano con los pies.
Pese al acoso y asedio, España no disfrutaba de demasiadas oportunidades de gol. Su rival, ni posesión ni opciones ofensivas. Así que se llegó al descanso con ese 2-0 y una brutal imagen de supremacía de la selección. Aún hubo tiempo de ver, eso sí, una bonita combinación entre Mata y Torres, con dejada de tacón de este último, que el asturiano envió alto.
En la reanudación, Del Bosque introdujo tres cambios. Reina, Piqué y Silva entraron por Casillas, Sergio Ramos y Navas. La decoración no cambió. El balón continuaba siendo de España que pronto pudo marcar en una internada de Cesc, con buen pase de Silva, pero Montrevil estuvo atento.
Al encuentro le seguía faltando chispa, fuera por el calor o por la inexistente motivación competitiva. Los numerosos cambios en una y otra selección hacían que el partido fuera cada vez más tedioso. En el minuto 59, Torres y Cesc dejaron sus respectivos puestos a Iniesta y Soldado.
El delantero del Valencia tuvo una buena ocasión nada más entrar en el terreno de juego, pero cruzó demasiado su disparo cuando se encontraba solo aunque algo escorado. El propio Soldado estrelló una pelota en el palo en el minuto 70 cuando lo tenía todo a favor para marcar. Justo después, Del Bosque dio entrada a Xavi Hernández al terreno de juego en lugar de Mata.
La sorpresa llegó a un cuarto de hora del final, cuando Guerrier, en una bonita jugada individual con autopase y recorte a Reina incluidos, acortó distancias. Este tanto envalentonó a los haitianos, que buscaron la portería de España. Pese a ello, la opción más clara la tuvo Soldado, que otra vez se encontró con el palo.
En el minuto 83, Silva pudo marcar pero Montrevil interpuso su cuerpo. El rechace lo remató Soldado, encontrando un zaguero en su camino. A partir de aquí, nada más. Los aburridos minutos finales pusieron un triste epílogo a un partido muy pobre.
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