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martes, 27 de noviembre de 2012

Uso de microchip en las mascotas


Hoy en día las agrupaciones y movimientos a favor de los animales hacen denodados esfuerzos por minimizar el problema de maltrato, abandono y pérdida de las mascotas en las calles, pero que lamentablemente este será un círculo vicioso del que no podremos salir siempre y cuando no exista una verdadera ley debidamente reglamentada que pare este abuso. Miles de animales hoy en día sufren  problemas generalmente  de maltrato, abandono, algunos de ellos llegan hasta la extenuación, mutilación, parálisis y con daños irreparables al borde de la muerte por parte de sus propietarios.
Existen las perreras pero no todos acaban allí, sino son solo algunos de miles que logran ingresar y con mucha suerte logran ser adoptados o colocados, incluso dentro de la misma perrera a veces son sacrificado,  puesto que pasan bastante tiempo y porque no hay disposición de medios  para mantenerlos.  Para un perro o un gato su dueño lo es todo;  si pierde a su dueño, pierde todo y si además quien debe protegerlos es precisamente quien lo agrede, podemos imaginar cual es el estado de ansiedad y sensación  de abandono de estos animales.
Pet ID Perú es una organización que está implementando el uso del microchip para mascotas, pues ya  es posible identificar , registrar (municipalidad) y hasta localizar  a nuestro animal doméstico. Existe en realidad leyes establecidas N° 27596 y N°27265  de protección a los animales domésticos y animales silvestres en cautiverio que regulan el sistema, por tanto el cumplimiento de esta obligación es sumamente importante. No lo decimos tan sólo pensando en la idea de evitar una posible sanción administrativa si es que no cumplimos con la misma, sino más bien sobre la base de los objetivos que se consiguen con esa identificación.
El primero de ellos es el control administrativo de la tenencia de animales domésticos. Con este control administrativo ganamos en dos aspectos. Los propietarios responsables de sus animales consiguen una garantía frente a la posible pérdida o robo de su mascota. Ante una de estas situaciones, una vez localizado el animal, resultará relativamente sencillo localizar a su dueño y no se le dará la categoría de abandonado. Y los propietarios que no son responsables y optan por el abandono serían, al igual que los otros, más fácilmente localizables para ser sancionados como corresponde. De esta manera, con imposición continuada de sanciones, tal vez el número de abandonos podría comenzar a reducirse favorablemente.
Pero, además, la identificación puede servir para otras muchas cuestiones como, por ejemplo,como arma para controlar la situación y el cumplimiento del resto de las obligaciones que implica la tenencia de un animal doméstico. La posibilidad está ahí, está regulada, y como en tantas otras ocasiones, debemos decir que lo que falta realmente es la capacidad para que, del papel de la ley, pase a ser una realidad efectiva
Como norma general, esta obligación se aplica, en principio, sobre perros y gatos aunque muchas de las normas abren la posibilidad de que reglamentariamente se extienda la obligatoriedad de la identificación a otros animales. Pero, ¿qué significa identificar? Identificar supone que el animal lleve en su cuerpo algún elemento que permita determinar claramente su procedencia y los datos de su propietario y que no resulte fácil de eliminar o perder, como puede ser una placa o un collar (aunque algunas normas autonómicas disponen igualmente que el animal lleve estas placas o collares cuando circula por una vía pública como un modo de identificación complementario). Los sistemas que se barajan en la actualidad son dos básicamente: realizar sobre la piel del animal un tatuaje convencional que debe permanecer visible y legible toda la vida del animal o implantar el denominado “microchip”, que es una cápsula subcutánea cuya lectura permite igualmente conocer los datos necesarios del animal. Este último sistema es el preferido, al tratarse de un sistema mucho más seguro y práctico que el del tatuaje y, sin duda, es el más recomendable. Obviamente, la implantación del microchip debe hacerse en una clínica veterinaria con todas las garantías sanitarias para el animal en el sentido de que dicho microchip sea uno de los que reúnen todos los requisitos para ello.
Una vez efectuada la identificación, debemos conservar el ID o la documentación correspondiente junto con el resto de documentos del animal por si en algún momento fuera preciso presentarla e identificarnos como propietarios de nuestra mascota.
Por lo tanto, a partir de ahora seamos responsables e identifiquemos a nuestras mascotas.RPP