La demanda interna impulsó el crecimiento trimestral más fuerte de Alemania en más de un año entre abril y junio, generando optimismo de que la economía más grande de Europa pueda tener un mejor rendimiento en 2013 y apoyar la incipiente recuperación de la zona euro.
Detalles difundidos el viernes mostraron un aumento de la construcción después de un duro invierno boreal, un fuerte apetito de las empresas por máquinas y equipamiento y un consumo de salud privada que apuntalaron un incremento trimestral del 0,7 por ciento del Producto Interno Bruto alemán (PIB).
Analistas dijeron que los datos de Alemania podrían generar revisiones al alza de los pronósticos de crecimiento de 2013 y apoyar la recuperación tentativa de la economía de la zona euro, que volvió a crecer en el segundo trimestre después de 18 meses de contracción.
"La composición del crecimiento es muy buena. Está siendo impulsada más fuertemente desde adentro, lo que es bueno para Alemania y la zona euro", dijo el economista Holger Sandte, de Nordea. "También es positivo que las firmas estén invirtiendo más en equipamieto y ya no estén tan indecisas", agregó.
Los datos también confirmaron una estimación anticipada previamente que mostraba que el PIB de Alemania estaba por encima del 0,9 por ciento en el año en el segundo trimestre.
La demanda doméstica sumó 0,5 puntos porcentuales al PIB en el trimestre y el comercio exterior agregó otros 0,2 puntos.
"El crecimiento está ampliamente apoyado por dos tercios viniendo de la demanda doméstica, un tercio del comercio (...) Este podría ser el comienzo de una mejora duradera de la inversión. Las bajas tasas de interés y el regreso de la confianza proveen bases sólidas para esto", dijo Christian Schultz, del banco Berenberg.
Los fuertes datos de crecimiento del segundo trimestre, difundidos un mes antes de una elección federal, son buenas noticias para la canciller Angela Merkel mientras busca un tercer período de gobierno en la votación del 22 de septiembre.
Su Gobierno espera un crecimiento del 0,5 por ciento en 2013, pero el ministro de Finanzas, Wolfgang Schaeuble, dijo esta semana que el crecimiento anual podría terminar siendo del 0,7 por ciento.
Mientras la potencia económica europea siguió a flote durante los primeros años de la crisis de la zona euro, bajó el ritmo el año pasado e incluso se contrajo en el cuarto trimestre al disminuir las exportaciones y la inversión.
Pero las inversiones se incrementaron significativamente entre abril y junio, en gran parte debido a efectos relacionados con el clima después de un invierno boreal inusualmente largo y frío, mientras que el intercambio comercial neto también hizo una contribución positiva al crecimiento.
Detalles difundidos el viernes mostraron un aumento de la construcción después de un duro invierno boreal, un fuerte apetito de las empresas por máquinas y equipamiento y un consumo de salud privada que apuntalaron un incremento trimestral del 0,7 por ciento del Producto Interno Bruto alemán (PIB).
Analistas dijeron que los datos de Alemania podrían generar revisiones al alza de los pronósticos de crecimiento de 2013 y apoyar la recuperación tentativa de la economía de la zona euro, que volvió a crecer en el segundo trimestre después de 18 meses de contracción.
"La composición del crecimiento es muy buena. Está siendo impulsada más fuertemente desde adentro, lo que es bueno para Alemania y la zona euro", dijo el economista Holger Sandte, de Nordea. "También es positivo que las firmas estén invirtiendo más en equipamieto y ya no estén tan indecisas", agregó.
Los datos también confirmaron una estimación anticipada previamente que mostraba que el PIB de Alemania estaba por encima del 0,9 por ciento en el año en el segundo trimestre.
La demanda doméstica sumó 0,5 puntos porcentuales al PIB en el trimestre y el comercio exterior agregó otros 0,2 puntos.
"El crecimiento está ampliamente apoyado por dos tercios viniendo de la demanda doméstica, un tercio del comercio (...) Este podría ser el comienzo de una mejora duradera de la inversión. Las bajas tasas de interés y el regreso de la confianza proveen bases sólidas para esto", dijo Christian Schultz, del banco Berenberg.
Los fuertes datos de crecimiento del segundo trimestre, difundidos un mes antes de una elección federal, son buenas noticias para la canciller Angela Merkel mientras busca un tercer período de gobierno en la votación del 22 de septiembre.
Su Gobierno espera un crecimiento del 0,5 por ciento en 2013, pero el ministro de Finanzas, Wolfgang Schaeuble, dijo esta semana que el crecimiento anual podría terminar siendo del 0,7 por ciento.
Mientras la potencia económica europea siguió a flote durante los primeros años de la crisis de la zona euro, bajó el ritmo el año pasado e incluso se contrajo en el cuarto trimestre al disminuir las exportaciones y la inversión.
Pero las inversiones se incrementaron significativamente entre abril y junio, en gran parte debido a efectos relacionados con el clima después de un invierno boreal inusualmente largo y frío, mientras que el intercambio comercial neto también hizo una contribución positiva al crecimiento.
REUTERS