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sábado, 27 de agosto de 2011

Habitantes de Puerto Cabello sufren por malos olores de comida dañada

Aunque autoridades militares niegan que se estén quemando alimentos pertenecientes a Pdval, en las instalaciones de la División para el Almacenamiento y Control de Químicos y Explosivos (Diacoquerce), Puerto Cabello, vecinos denuncian que los olores a comida quemada y descompuesta se sienten día y noche

Aquí no hay destrucción, ni quema de comida“, indicó el sargento Carlos Enrique Hernández desde la puerta de esa división, donde se veían camiones de Pdval y contenedores vacíos. “De aquí se descargaron maquinarias: excavadoras y retroexcavadoras, que van a Fuerte Tiuna y que las va a entregar el comandante presidente hoy mismo. Los periodistas no están autorizados a pasar”, dijo Hernández.

Sin embargo, habitantes de varios sectores de la parroquia Juan José Flores, pertenecientes a Puerto Cabello, denuncian que en los últimos meses se ha sentido el hedor, situación que se repitió esta semana. Antonio García, del sector Morillo, afirma que la llegada de contenedores en camiones de Pdval a esas instalaciones militares continúa y que los días en que los olores se tornan más fuertes, las personas usan tapabocas y pañuelos. “Nos dimos cuenta que el hedor venía de unos contenedores que estaban en la zona militar. Luego de las averiguaciones que hicimos, vimos que era comida descompuesta y que la estaban quemando”. 

Elisaúl Castellanos, otro de los afectados, indica que en los últimos días se sienten olores “insoportables”, similares carne descompuesta o cremada, que se intensifican en las noches y que, afirma, provienen de la Diacoquerce. “No nos cuadra que por un lado se estén necesitando los alimentos y por el otro se estén perdiendo y quemando”, indicó Castellanos.

Por su parte, Johana Sarmiento, desde Los Lanceros, dice que los olores se agudizan a partir de las 6 de la tarde y se prologan hasta la 1 de la madrugada. Dice que suele encerrarse en su casa para proteger a dos de sus tres hijos que sufren de asma. “Pero los olores igual penetran”, asegura. 

Por Ileana García Mora
Con información de Últimas Noticias