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jueves, 12 de diciembre de 2013

Hugo Chávez y Nelson Mandela juntos en un legendario pesebre de Honduras

 AFP).- Las muertes de los expresidentes de Sudáfrica Nelson Mandela, y de Venezuela, Hugo Chávez, comparten escenario este año, con el denunciado “fraude electoral” contra la esposa de Manuel Zelaya, la encarnizada violencia y el Mundial Brasil 2014, en un legendario pesebre construido por un arquitecto en plena capital hondureña.
“Mandela fue lo último que pusimos, tuvimos que agregarlo”, afirmó a la AFP el arquitecto Fernando Martínez, quien desde 1950, salvo raras interrupciones, elabora el pesebre anualmente, primero en su casa y desde hace unos años en un local en unos de los centros comerciales de mayor afluencia de personas.
El área de 100 m2 donde se extienden las construcciones y figuras de madera y barro está dividido por temas: religioso, político, social, urbanismo y agricultura, aunque también aparece la clasificación de la selección al Mundial de Brasil 2014.
“Lo principal es la parte religiosa: el nacimiento del niño Jesús” porque “es la razón de ser” del esfuerzo que tarda dos meses en largas y extenuantes jornadas desde el 1 de octubre, cuenta Martínez respecto esta zona que para los visitantes, hasta 50.000 por año, puede parecer la menos atractiva.

Mandela llegó a última hora

En la parte política, el fallecimiento de Mandela, y la gran cantidad de dignatarios que asisten a la despedida, fue incorporado a última hora. Él está representado por un ataúd y una fotografía del mandatario fallecido, así como estatuillas de él y de los presidentes que asisten a las honras fúnebres. Muy cerca de las escenas parecidas que corresponden a la muerte de Chávez.
También en la parte política se aprecia “el fraude” en las elecciones del 24 de noviembre que denuncia el derrocado Manuel Zelaya contra su esposa, la candidata izquierdista Xiomara Castro; y “Juan Fogón”: como se hace llamar el presidente electo Juan Orlando Hernández, revirtiendo una burla que le acuñaron sus adversarios por regalar estructuras de cocina metálicas a familias pobres.
En lo social, aparece retratada la violencia -que tiene a Honduras en el primer lugar de homicidios en el mundo, 85,5 por cada 100.000 habitantes- con figuras de ataúdes de madera y bolsas plásticas amarillas con las que recogen los cuerpos, un promedio de 20 al día.Un desfile de corruptos en vehículos y un rótulo “Se venden diputados”, son dos de las críticas más atroces que aparecen contra el flagelo que ubica a Honduras con el índice de percepción de corrupción de los más altos de América Latina.
El narcotráfico, uno de los factores de la violencia, se refleja con mansiones, haciendas, helicópteros, avionetas, lanchas y otros bienes.
La clasificación hacia Brasil-2014 aparece representada también con estatuillas de los jugadores que lograron la clasificación por la zona de Concacaf.
En cuanto al urbanismo, se resalta los infernales congestionamientos viales que desesperan en la capital a causa de la construcción de pasos a desnivel y un metro bus en la poca parte plana que tiene la topografía accidentada de la ciudad, de un millón de habitantes.