Cristina Kirchner llegó a las 20.20 al hotel Intercontinental, donde funciona el comando de campaña del Frente para la Victoria. La Presidenta ocupó el piso 19 con su núcleo familiar y allegados. En tanto, el piso 18 está dispuesto para los ministros de gabinete; el 17 para los secretarios de Estado y el 16 para la prensa de Gobierno.
La Presidenta arribó al Aeroparque porteño antes de las 16 y se dirigió en helicóptero a la Residencia de Olivos. Cerca de las 20, aterrizó en el helipuerto de la Casa Rosada, desde donde fue trasladada al bunker k.
El Gran Salón Monserrat, ubicado en el segundo subsuelo del hotel, está situado junto a los lugares dispuestos para el Centro de Prensa, donde se encuentran acreditados 500 periodistas, 153 de ellos provenientes de más de 60 países del continente, Europa y Estados Unidos.
La puerta del hotel Intercontinental, donde el kircherismo instaló su búnker, se llenó de militantes de distintas agrupaciones oficialistas.
Mientras tanto, en las afueras del hotel, militantes de organizaciones sociales, políticas y gremiales que impulsan la reelección de la Presidenta se congregan en la esquina del hotel, en la esquina de Tacuarí y Moreno.
El hijo del titular de la CGT y candidato a diputado por la provincia de Buenos Aires, Facundo Moyano, fue uno de los primeros en llegar. Estuvo acompañado por el diputado y titular del sindicato de judiciales, Julio Piumato.
Los principales dirigentes de la agrupación La Cámpora no podían ocultar su entusiasmo en el búnker. Mientras en la puerta del hotel los militantes festejaban, adentro hacían lo mismo Andrés “Cuervo” Larroque, José Ottavis e Iván Heyn.
“Ahora hay que seguir profundizando y mejorando la distribución de la riqueza”, aseguró el dirigente Luís D´Elia cuando estaba por ingresar al hotel.
Por otro lado, el candidato a gobernador bonaerense Martín Sabbatella destacó el desempeño de Nuevo Encuentro en la provincia. “Mejoramos en comparación con las primarias”, manifestó el ex intendente de Morón.
La mayoría de los dirigentes ya se encuentran entre los pisos 16 y 19 del hotel. Allí están los ministros y los máximos referentes del Frente Para la Victoria.
Cuando el ministro del Interior, Florencio Randazzo, daba a conocer los primeros números oficiales, los cánticos en el búnker se desataron en dos momentos. Cuando el funcionario dio a conocer la cantidad de votos que obtuvo Duhalde y cuando dijo que el candidato del Frente de Izquierda, Jorge Altamira, estaba por encima de la aspirante de la Coalición Cívica, Elisa Carrió.
EL CLARIN
