Con la exitosa realización de un trasplante renal de donante vivo el reciente 9 de noviembre, el Instituto Médico La Floresta (IMLF) pasó a formar parte del Programa Nacional de Trasplante Renal en Venezuela (PNTRV) que se viene llevando a cabo.
El trasplante fue realizado por un equipo multidisciplinario de médicos nefrólogos y cirujanos urólogos del IMLF. El donante decidió de manera voluntaria y altruista donar uno de sus riñones para asegurar una vida normal a su hermano y contribuir a la incorporación total de sus actividades profesionales, familiares y sociales.
"Dar vida" es el lema que este hombre ha puesto en marcha con su actitud.
El trasplante fue efectuado por un equipo de especialistas del Centro de Cirugía Robótica y de Invasiva Mínima (CIMI) y la Unidad de Nefrología del IMLF.
La extracción del riñón fue realizada por vía laparoscópica por los doctores René Sotelo y Oswaldo Carmona, mientras que el trasplante propiamente dicho estuvo a cargo de Carlos Rodríguez y Robert De Andrade. La coordinación general y manejo clínico pre y post-trasplante la realizaron los nefrólogos Ezequiel Bellorín Font, Raúl Carlini y Eddy Hernández.
Para satisfacción de todos, ambos pacientes están evolucionando satisfactoriamente, informó Bellorin Font.
PROBLEMA DE SALUD PUBLICA
El trasplante renal es un procedimiento ampliamente establecido y consolidado como la mejor opción de tratamiento para los pacientes que sufren de enfermedad renal crónica avanzada.
En Venezuela se realizan unos 400 trasplantes renales por año entre donantes vivos y donantes fallecidos. Sin embargo, la cifra es muy baja para la demanda existente.
La enfermedad renal crónica se ha convertido en un problema de salud pública que afecta a un alto porcentaje de la población. Sólo los pacientes con enfermedad avanzada requieren de tratamiento sustitutivo con diálisis o trasplante renal, mientras que muchas personas que sufren la enfermedad ni siquiera lo sospechan, ya que en las etapas iniciales, en las que pueden aplicar medidas preventivas y evitar su progresión, no produce síntomas muy evidentes.
En el país con unos 13.000 pacientes con enfermedad avanzada bajo las diferentes modalidades de diálisis, se consideran candidatos a trasplante unos 5.000 pacientes. No obstante, tan sólo 1.327 están en las listas de espera para trasplante en los diferentes centros autorizados, de los cuales menos de un 30% recibe un trasplante cada año.
Esta disparidad entre oferta y demanda debe ser equilibrada mediante una mejora en las donaciones de órganos, tanto de personas vivas como fallecidas, y un aumento en la capacidad médica y quirúrgica para la realización de trasplantes.
De acuerdo con Bellorin, la incorporación del IMLF es un impulso importante para el crecimiento del programa de trasplante renal.
Las ventajas que ofrece un equipo multidisciplinario, con médicos de trayectoria utilizando las técnicas mas avanzadas de cirugía laparoscópica, son una garantía para los pacientes y el PNTRV.
NOTA DE PRENSA
