Tras debutar en el Joan Gamper como jugador del Barça, Luis Suárez ha sido presentado este mediodía ante los medios de comunicación en la sala de prensa Ricard Maxenchs.
El delantero uruguayo, que ha firmado por cinco temporadas, ha costado 81 millones de euros y cuenta con una cláusula de rescisión de 200 millones, se ha mostrado muy feliz por su aterrizaje en el Camp Nou.
“Cuando surgió la posibilidad de fichar por el Barça, me olvidé de todo –en referencia a las otras ofertas que tenía- y quise cumplir el sueño que tenía de niño”, ha explicado el charrúa, tras agradecer al club, al presidente, los directivos y el entrenador haber confiado en él.
Luis Suárez explicó de dónde le viene su cariño por el club azulgrana. “El sueño de jugar en el Barça viene desde hace años. Todo el mundo sabe la relación que tengo con Barcelona por mi señora y su familia, había venido a ver algún partido y cuando surgió la posibilidad no lo dudé, me olvidé de todo y quise cumplir el sueño que tenía de chico”, comentó.
Suárez habló de sus sensaciones tras su debut de ayer en el Camp Nou. “Las sensaciones fueron emocionantes, espectaculares. Nunca había jugado ningún partido aquí y la verdad es que me encantó la sensación. Todavía no lo puedo creer, no me imagino que esté cumpliendo este sueño tan bonito”, desveló. Al charrúa no le asusta el desafío que le espera en el Barça tras convertirse en el fichaje estrella de este verano. “Para mí las estrellas están en el cielo. Sí existen los jugadores importantes y aquí los hay. Yo vengo a ayudar al equipo a ganar títulos”.
Trabaja para no reincidir
Luis Suárez tiene ya muy asumido el castigo que le impuso la FIFAy que posteriormente fue ratificado por el TAS, algo que le impedirá jugar un partido oficial con el Barça hasta el fin de semana del 25-26 de octubre, coincidiendo con el Clásico en el Bernabéu. “Es la que es y hay que aceptarla”, dijo, tras reconocer que está trabajando con especialistas para no reincidir. “Es un tema privado, me lo reservo pero sí he tratado con profesionales adecuados”, admitió.
Respecto a la lección que ha sacado de todo es, Suárez comentó que “la lección la tengo que tomar conmigo mismo. Tengo que ser precavido con todas esas acciones”, reconoció, tras explicar que si no pidió antes perdón “fue porque después de todo lo que pasó, no tenía ganas de hacer nada, estaba muy deprimido y sólo quería estar con mi señora y mis hijos. Pero pedí perdón”, recalcó el uruguayo, que también mandó un mensaje a sus fans. “A mis fans les digo que no se volveré a cometer el mismo error”, en referencia al mordisco que le propinó a Chellini en el pasado Mundial. En este sentido, el uruguayo tiene claro que ahora “sólo me queda trabajar y prepararme lo mejor posible para cuando me toque jugar”.
Encantado con el recibimiento del equipo
Operado del menisco justo antes de que participara en el Mundial, Luis Suárez explicó que se encuentra bien. “Me costó volver a trabajar, pero hice muy buen trabajo y no me duele nada la rodilla. Ahora sólo me duelen los pies de no usar los zapatos de fútbol”, bromeó.
Suárez se mostró encantado por el recibimiento que ha tenido en el equipo. “Me llamó la atención el gran ambiente que hay dentro del vestuario. Lo que viví me hace sentirme muy contento y muy conforme”, señaló el charrúa, que se ofrece para “jugar en cualquier demarcación del ataque”.
Aplausos para Messi y Neymar
Lejos de sentirse presionado por compartir delantera con Messi y Neymar, el charrúa ha admitido que es un honor estar a su lado. “Está claro que compartir equipo y vestuario con jugadores como ellos me ilusiona y me pone muy contento, no sólo con ellos. Son 11 jugadores los que salen a la cancha, no depende de uno o dos”, dijo, tras reconocer que verlos en acción en el Gamper desde el banquillo “me hizo que me entraran ganas de levantarme y aplaudirles”.
MD