El blanqueamiento dental es un proceso por el cual se le devuelve a los dientes su color natural, se reduce varias tonalidades y se restablece el brillo, en la actualidad es uno de los procedimientos estéticos al que más se somete la gente para que su sonrisa sea más atractiva.
Con el tiempo se produce una modificación y oscurecimiento fisiológico del color de los dientes que en ocasiones se ve agravado con la alimentación, la ingesta de café, té, colorantes alimentarios, el tabaco.
Además existen otros fenómenos como el uso de antibióticos o inconvenientes en la composición de los dientes, el exceso de flúor o la falta de mineralización que originan que los dientes erupcionen pigmentados.
Según explica la doctora Mónica Espinoza, directora de la clínica Plus Dental Care “este tratamiento puede utilizar las diversas técnicas como son el blanqueamiento láser, casero o mixto consiguiendo un resultado satisfactorio para el paciente”.
Sin embargo el blanqueamiento dental está contraindicado cuando el paciente presenta:
- Caries
- Zonas del diente desprotegidas
- Defectos en la formación del esmalte
- Encías inflamadas
Igualmente este tratamiento no se debe realizar durante el embarazo y en los casos de pacientes muy fumadores el resultado no perduraría.
La duración del blanqueamiento puede variar, influye la causa de la decoloración, o el color inicial de los dientes.
“Cada paciente responde de forma diferente a la aplicación de los geles blanqueadores, por lo que se tiene que combinar luz, tiempo y concentración de forma individualizada para cada paciente con el fin de realizar un tratamiento seguro, confortable, a la vez de conseguir un rápido y duradero efecto de blanqueamiento dental, logrando aclarar varios tonos ".
Finalmente se recomienda que durante y posteriormente al tratamiento el paciente:
- Evite fumar
- No consuma alimentos oscuros
- Tenga una higiene oral adecuada
- No utilice colutorios a base de clorhexidina