El juzgado de Frederiksberg (Dinamarca) comenzó hoy el juicio al sueco Gottfrid Svartholm Warg, cofundador del popular portal The Pirate Bay (TPB), y a un ciudadano danés, en el mayor caso de piratería informática en este país nórdico.
Warg y su cómplice son sospechosos de realizar un ataque informático contra la empresa CSC, que les permitió tener acceso durante varios meses a los registros policiales de carnés de conducir y números de identificación personal que aloja esa firma.
La acusación incluye delitos como perturbación continuada de sistemas de información y obtención de datos confidenciales, penados con hasta seis años de cárcel, aunque por lo que ha trascendido en las vistas previas, la fiscal pedirá sólo cuatro.
El informático sueco rechaza las acusaciones y asegura que su ordenador, donde se han encontrado archivos encriptados de CSC, fue manipulado a distancia.
El otro inculpado, un joven cuya identidad no ha sido difundida y que lleva encerrado en prisión preventiva desde hace 17 meses, se ha negado a declarar hasta ahora.
La larga estancia en la cárcel de forma preventiva, nueve meses en el caso de Warg, y las restricciones de las comunicaciones han sido objeto de crítica en un caso en el que la actuación de la Policía danesa tampoco ha salido bien parada.
Cinco meses tardaron en descubrir que los registros estaban sufriendo un ataque y un mes en seguir la pista facilitada por las autoridades suecas, según ha trascendido en los medios daneses, que cuestionan también que los técnicos policiales no hayan podido descifrar el código de protección del PC del informático danés.
"Anakata", alias de Warg en internet, y tres personas vinculadas a TPB, uno de los mayores portales del mundo para intercambio y descarga de archivos, fueron condenados en 2009 en Estocolmo a un año de cárcel por un delito contra la ley de derechos de autor.
Warg no se presentó al juicio de apelación y se fugó a Camboya, desde donde fue extraditado a Suecia en 2012.
El "hacker" sueco cumplió dos tercios de la condena, pero, al salir de prisión, fue acusado inmediatamente de otro delito de piratería informática en Suecia.
Warg fue condenado inicialmente a dos años por este delito, pero la Corte de Apelación le rebajó la pena a la mitad; al desestimar el Supremo su recurso, entró en prisión para cumplir la nueva condena y acabada esta, fue extraditado a Dinamarca.