Las autoridades uruguayas evaluarán esta semana los expedientes y las entrevistas que realizaron a finales de agosto a varias familias de refugiados sirios en Líbano para presentar la lista de candidatos que podrán ser acogidos en el país, informaron hoy fuentes oficiales.
El secretario de Derechos Humanos de la Presidencia de Uruguay, Javier Miranda, explicó en una rueda de prensa los avances en este asunto tras el viaje de la delegación oficial del pequeño país suramericano a Líbano que trabó contacto directo con los refugiados que mostraron su interés en asentarse en el país y adelantó los próximos pasos a dar en este sentido.
Miranda informó que estas familias tuvieron entrevistas con funcionarios uruguayos en Beirut y que en esos encuentros se buscó informar cabalmente de lo que podrían encontrar en Uruguay y evitar crear "falsas expectativas".
Ahora falta que se analice bien tanto esas entrevistas como los informes sobre las familias presentados por el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) al Gobierno, lo que se hará a lo largo de los próximos días, y decidir cuáles de todas ellas podrán formar parte del primer contingente de 40 personas que tiene previsto llegar al país a finales de este mes.
Se espera que otro grupo de 80 personas llegue al país a principios de año que viene para cumplir con el cupo de 120 refugiados a que Uruguay se comprometió acoger.
"El objetivo es dar un reasentamiento a personas que viven en una situación de alta vulnerabilidad. Su presencia en Uruguay es voluntaria. Ojalá sea posible que en futuro puedan volver a su tierra si quieren, pero trabajamos para que si quieren permanecer en Uruguay lo hagan y lleven aquí una vida digna", apuntó Miranda.
Se espera que las familias que finalmente lleguen a Uruguay se instalen durante unas 6 u 8 semanas en un albergue provisional ubicado a las afueras de Montevideo para iniciar allí su contacto con la vida, la cultura y la lengua de Uruguay.
Después de ese tiempo, los refugiados podrán marchar a un hogar "definitivo" que se designará en función de las posibilidades laborales y de integración que tengan las familias.
Miranda apuntó que la mayoría de los refugiados pertenecen a familias "muy numerosas" y son de origen rural, con experiencia laboral en el campo y la construcción.
