La Misión de Asistencia de la ONU en Afganistán (UNAMA) condenó el ataque suicida en Kabul perpetrado mayoritariamente contra trabajadores de los medios de comunicación.
El asalto tuvo lugar el miércoles de esta semana y se saldó con un balance de 8 muertos y 24 heridos entre ellos mujeres y niños que iban de regreso a casa desde el trabajo.
El atentado fue reivindicado por el Talibán y se produjo cuando un asaltante suicida alcanzó deliberadamente a una camioneta que transportaba a trabajadores de la empresa productora de televisión Tolo.
El pasado octubre el Talibán había amenazado a Tolo y otras organizaciones informativas designándolas como objetivos militares.
La Misión de la ONU extendió sus condolencias a las familias de los fallecidos y deseó una pronta recuperación para los heridos.
