La actriz Kate del Castillo dirá "toda la verdad" a las autoridades mexicanas sobre su relación con el capo Joaquín "el Chapo" Guzmán, afirmó hoy su padre, Eric del Castillo, quien indicó que su hija aún no ha recibido la citación de la Fiscalía para declarar como testigo.
"Todo está limpio, así nos lo ha hecho saber nuestra hija", declaró a la emisora Imagen Radio el actor, quien señaló que hay un linchamiento contra Kate y confió en que termine "esta novela".
"Que investiguen, que no levanten falsos (testimonios)", pidió Del Castillo, y añadió que su contador ha estado revisando sus cuentas y las de su hija desde mayo pasado y no han "encontrado nada".
La fiscal mexicana, Arely Gómez, señaló el martes que se investiga si la actriz recibió recursos del líder del cártel de Sinaloa para su tequila, Honor del Castillo, o una película sobre la vida del capo, y aseguró que por ahora solo tiene "indicios" de un posible lavado de dinero.
Eric del Castillo recordó que fue el capo el que la buscó a su hija después de que lo invitara a la reflexión en 2012 a través de Twitter para que traficara con el bien en lugar de hacerlo con drogas y personas.
Reiteró que su hija buscaba "un bien" a la sociedad al "analizar la mentalidad de este tipo de personas" a través de una película o de un libro, y recordó que Kate es embajadora de la ONU contra la trata de personas.
El actor describió a su hija como una persona muy especial, temeraria, audaz e inquieta, algo que lleva "en los genes", y confió en que su familia, de la que dijo sentirse orgulloso, saldrá bien librada y fortalecida de esto.
Precisó que hasta el martes Kate no había recibido la citación de la Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía) ni en México ni en Los Ángeles (EE.UU.), donde vive desde hace varios años, pero aseguró que está dispuesta a colaborar.
El nombre de la actriz salió a relucir el 9 de enero pasado cuando la revista Rolling Stone publicó el relato que el actor estadounidense Sean Penn escribió del encuentro que sostuvo con Guzmán en octubre de 2015 en el noroeste de México. EFE
