El Secretario General de la ONU acudió este viernes a la sede de la Misión de Francia ante Naciones Unidas, donde urgió nuevamente a la tolerancia y al respeto a las religiones y a la libertad de expresión en todas las sociedades.
Ban Ki-moon firmó el libro de condolencias por el atentado del miércoles contra el semanario Charlie Hebdo, expresó su solidaridad con el pueblo y el gobierno franceses, y manifestó su apoyo a los periodistas y trabajadores de la comunicación.
Ban calificó el ataque como inaceptable y subrayó que los responsables no son un país ni una religión, sino unos terroristas.
"Urjo a todos los pueblos del mundo a elevar el nivel de tolerancia y respeto a las creencias, religiones y tradiciones de los demás. Si nuestra religión o credo es importante, debemos saber que también lo es el de otros", recalcó.
El titular de la ONU añadió que las diferencias deben resolverse pacíficamente, mediante el diálogo y aseveró que ese tipo de acciones deben ser procesadas por la justicia.