(Agencias) - Exxon Mobil dijo el domingo que un panel de arbitraje
internacional le concedió unos 908 millones de dólares en el litigio que
mantenía con Venezuela por la nacionalización de sus activos en el
país, cifra inferior a lo solicitado inicialmente por la firma
estadounidense.
El veredicto de la Cámara de Comercio Internacional (ICC por su sigla en
inglés) fue conocido el sábado y fuentes del gobierno de Venezuela
dijeron a Reuters que lo consideraban “favorable” para el país OPEP,
pero no hablaron de un monto.
“La decisión de la ICC confirma que (la petrolera estatal) PDVSA tiene una
obligación contractual con Exxon Mobil. La decisión de la ICC es por 907,58
millones de dólares”, dijo un empleado de la empresa en un correo
electrónico.
Las petroleras Exxon y ConocoPhillips introdujeron arbitrajes contra
Venezuela en el 2007 solicitando unos 40.000 millones de dólares en
compensación, pero Venezuela dijo que estimaba pagar no más de 2.500
millones de dólares por ambos casos.
Exxon reclamaba actualmente 7.000 millones de US $ (ver noticia)
Una disputa hostil
La disputa entre Exxon y el gobierno de Hugo Chávez ha sido hostil.
En el 2008, la estadounidense obtuvo una orden cautelar de un juez británico
para congelar hasta 12.000 millones de dólares en activos externos de la estatal
Petróleos de Venezuela (PDVSA), pero la corte luego desestimó el caso en espera
de la resolución arbitral, que cursa en dos tribunales simultáneamente.
El ministro de Energía, Rafael Ramírez, dijo a Reuters este año que Venezuela
esperaba un fallo de la ICC para antes de que culminara 2011 y puntualizo que el
Gobierno pagaría una compensación “justa”.
Dijo también que Venezuela estimaba pagar no mas de 2.500 millones
por ambos arbitrajes (Exxon y Conoco) y descarto la posibilidad de acordar un
arreglo amistoso, aunque Chavez no desestimó esta opción hace algunas
semanas atrás, tras ser consultado al respecto en una rueda de prensa.
Exxon operaba la asociación estratégica Cerro Negro para extraer y mejorar
crudo extrapesado en la vasta Faja del Orinoco, así como el convenio de
exploración a riesgo La Ceiba, que no había iniciado producción.
Como parte de estos negocios, PDVSA además participa con 50 por ciento de
interés en la refinería de Chalmette, en Louisiana, que es operada por Exxon; y
tiene acciones en la unidad Merey Sweeney, de la refinería de Sweeney que es
operada por Conoco.
Las dos firmas estadounidenses se retiraron del país a finales de
2007 tras la ocupación de sus negocios por parte de PDVSA y de personal
militar. Los obreros pasaron a la nómina de la estatal, que ahora mantiene la
participación mayoritaria en todos los proyectos petroleros del país.