Si había alguien en el mundo que moría de ganas de decir adiós a 2011 y la
bienvenida a un nuevo año es Kim Kardashian. Y qué mejor manera de
hacerlo que con un sexy vestido nuevo y una gran fiesta en la ciudad del
pecado. La estrella de televisión lucía sensacional y llegó en la
víspera de una fiesta de Año Nuevo en Las Vegas con un vestido corto blanco, que
se aferraban a sus curvas sensuales, reportó el diario estadounidense Daily
Mail