AP) — A menos de seis meses de las elecciones presidenciales, Hugo Chávez apenas ha iniciado su campaña con miras a una reelección. En vez de eso, ha estado abocado a su lucha contra el cáncer, con viajes constantes a Cuba para recibir tratamiento y promesas públicas de que superará su enfermedad.
Pese a que el cáncer probablemente habría acabado con las ambiciones presidenciales de muchos políticos, para Chávez esta lucha contra la enfermedad se ha convertido de hecho en su principal estandarte. El cáncer podría fungir como un recurso político en caso de que su estado de salud se mantenga hasta las elecciones de octubre, y esa es la gran incógnita que gravita en la política venezolana.
La semana pasada, Chávez lloró mientras sostenía las manos de sus padres durante una misapara luego suplicar a Jesucristo que le dé más tiempo de vida.
“Dame tu corona Cristo, dámela, que yo sangro. Dame tu cruz, 100 cruces, que yo la llevo, pero dame vida porque todavía me quedan cosas por hacer por este pueblo y por esta patria. No me lleves todavía”, dijo el mandatario con gran vehemencia en una transmisión en vivo a nivel nacional.
Chávez expresó luego que tiene fe en un “milagro” mientras se somete a radioterapia en Cuba luego de dos cirugías en las que le fueron extirpados dos tumores de su área pélvica.
Sin embargo, hasta ahora, la que parecer ser una grave crisis de vida o muerte no ha afectado su apoyo político. Al contrario. Una encuesta reciente mostró que Chávez tiene una ventaja cercana a 14 puntos sobre su rival, Henrique Capriles.
El ministro de Información, Andrés Izarra, uno de los aliados clave de Chávez, dijo el lunes que el presidente no hará campaña puerta por puerta como su rival porque “no le hace falta”. Izarra agregó que el estado de ánimo de Chávez está siendo impulsado por sus partidarios. “Ese amor del pueblo, lo que ha surgido como un bálsamo, como parte de la medicina, como parte del tratamiento para recuperar la salud plena del presidente Chávez”, dijo Izarra en un discurso televisado.Y Chávez ha logrado mantener el respaldo pese a su imagen de presidente enfermo que sube y baja de los escalones del avión en sus frecuentes viajes hacia y desde Cuba para recibir tratamiento.
Se espera que Chávez se reúna el viernes con sus partidarios en el 10mo aniversario de su regreso al poder después de un breve golpe de Estado en 2002, y trazó un paralelo entre su lucha contra el cáncer y su supervivencia durante el golpe de Estado, cuando fue reincorporado a la presidencia en medio de una serie de grandes protestas callejeras a su favor.
“En ese momento, el amor del pueblo rescató a Chávez del borde de la muerte”,dijo Izarra. “En esta oportunidad el amor del pueblo está también rescatando a Chávez de una coyuntura particular de salud, que si no fuera por ese amor, estoy seguro quizás sus dolencias serían mayores, quizás sus sentimientos serían más, más difíciles, más duros”.
Para ambas partes del dividido panorama político de Venezuela, la enfermedad de Chávez tiene el potencial alterar la situación. El tema de lo que podría pasar en caso de que Chávez muera es tabú entre sus aliados políticos, mientras los líderes de su partido insisten en que Chávez será su candidato y que no cuentan con un plan de reemplazo.
Se mantiene la incertidumbre sobre la enfermedad de Chávez
Mientras tanto, Chávez utiliza hábilmente la incertidumbre para proyectarse a sí mismo como el protagonista de una narración más extensa, en ocasiones evocando a su propio héroe trágico, el líder independentista del siglo XIX Simón Bolívar.
En discursos y marchas, Chávez ha lanzado el lema “¡Viviremos y venceremos!”. Parece ser tanto su mantra personal como su apuesta política.
Las probabilidades de eso siguen siendo inciertas. Desde que anunció su diagnóstico en junio del año pasado, Chávez ha mantenido en secreto la información específica sobre su enfermedad, el tipo de cáncer que le fue detectado y la ubicación precisa de los tumores que le han sido extirpados.
Algunos expertos médicos indican que con base en la información del mismo Chávez, es muy posible que el cáncer regrese.
“El tumor es recurrente, y a nosotros nos indica que sus posibilidades de cura son mínimas debido a que en atención al cáncer, el mejor tratamiento es el primer tratamiento”, dijo el médico Julián Molina, oncólogo del Centro Integral del Cáncer de la Clínica Mayo en Rochester, Minnesota. Señaló que Chávez se sometió a una cirugía por un segundo tumor en febrero, lo que indica que su tratamiento de quimioterapia ha sido inefectivo.
Debido al régimen del tratamiento a que Chávez se somete, podría tener cierto tipo de sarcoma de tejido blando, dijo el médico Steve Hahn, profesor de oncología por radiación de la Escuela de Medicina Perelman de la Universidad de Pensilvania.Sin embargo, otros expertos médicos dicen que dependiendo del tipo y grado del cáncer de Chávez, el panorama podría no ser tan lúgubre y el mandatario podría tener una posibilidad decente de supervivencia.
“No necesariamente es pesimista”, dijo Hahn. “Si tuvo un sarcoma de bajo grado, entonces realmente existen pocas probabilidades de que se propague a otra zona y la radiación, en caso de que evite que regrese a la pelvis… esperemos que eso sería básicamente el final de la historia para él, es decir, que se ha controlado su enfermedad”.
El rostro de Chávez ha lucido hinchado en ocasiones durante sus tratamientos y en septiembre reconoció que tomaba esteroides junto con otros medicamentos. Los médicos indicaron que los esteroides pueden ser recetados como un medicamento para evitar las náuseas para algunos pacientes que enfrentan los efectos de la quimioterapia. Si bien los esteroides pueden ayudar a aumentar el apetito y los niveles de energía para tales pacientes, Molina aseguró que el uso excesivo de esteroides también puede causar un cúmulo de efectos secundarios, entre ellos la retención de líquidos, cambios de humor y aumento de presión sanguínea.
“Siempre es posible que le hayan dado un breve tratamiento de esteroides, se sintió bien, y luego pidió que, ya saben, se mantuviera. Es muy difícil cuando se es presidente y se tiene el poder de decir ‘esto es lo que deseo hacer”’, dijo Molina.
Mientras que la especulación y los rumores sobre el estado de salud de Chávez abundan en los medios de información y en las calles de Venezuela, Chávez ha exhortado a sus aliados políticos a no perder tiempo en responder a ellos.
Chávez se comunicó con el país a través de varios mensajes en su cuenta de Twitter mientras se encontraba en Cuba el miércoles, cuando su vicepresidente habló durante un mitin sobre el aniversario de los hechos violentos que precedieron al golpe de Estado de 2002. “¡Estoy poniéndome las botas de campaña! ¡Espérenme!!”, dijo Chávez en uno de sus mensajes.
Los partidarios de Chávez se han reunido regularmente en los eventos organizados por el gobierno para orar por su salud. En una avenida del centro de Caracas, los faroles están engalanados con pancartas que muestran a un saludable Chávez sonriendo y usando una boina roja de sus años como paramilitar del ejército, junto con la frase “¡Pa’lante Comandante!”
En una marcha reciente a favor de Chávez en el exterior del palacio presidencial, Magalys Martínez dijo ser optimista de que Chávez podrá superar su enfermedad.
“El quiere vivir bastante”, dijo Martínez, ella misma paciente de cáncer. “Para esta enfermedad, lo que necesita es tener la ambición de vivir”.
Otra de sus participantes en la marcha, Bernarda Mena de Palacios de 63 años, dijo estar agradecida porque el programa educativo del gobierno de Chávez le ayudó a obtener su diploma de secundaria.
“Nosotros oramos por el presidente”, dijo. “Tengo fe que él va a salir victorioso. Un presidente como este no lo podemos perder”.