(EFE).- Una oficial de la policía murió y otras dos personas resultaron heridas hoy en un ataque contra un helicóptero que participaba en las labores de búsqueda de 43 personas que fueron secuestradas el pasado lunes en la región Cuzco, informaron fuentes oficiales peruanas.
La alcaldesa de la provincia de La Convención, Fedia Castro, dijo a Radio Programas del Perú que “han derribado un helicóptero en la zona de Alto Kepashiato, en el sector de Lagunas”, mientras sobrevolaba la región en busca de los secuestrados por un grupo aparentemente de Sendero Luminoso.
El ministro de Defensa, Alberto Otárola, quien viajó hoy a la zona para supervisar el trabajo de búsqueda de los secuestrados llegó al centro de salud de Kiteni para verificar el estado de los heridos, dijo Castro.
La policía muerta, capitana Nancy Flores, era copiloto en el helicóptero, y los heridos son el artillero Luis Guerrero y el guía civil Elver Huamán, según informaron los medios locales.
Castro dijo a RPP que el helicóptero sobrevolaba en los alrededores del centro poblado de Kiteni aproximadamente a las 15.00 hora local (20.00 GMT) durante las labores de búsqueda de los trabajadores secuestrados del consorcio Camisea.
Después de dejar a un grupo de policías en la zona, y cuando se disponía a alzar vuelo, la nave recibió disparos desde el monte, presuntamente por los terroristas que mantienen retenidos a los trabajadores.
El lunes, unos 50 hombres armados secuestraron a un grupo de trabajadores de empresas vinculadas al consorcio de gas de Camisea en el centro poblado de Kepashiato, en la zona del Valle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE), un lugar selvático remoto y de muy difícil acceso.
Los secuestradores, supuestos miembros de la banda armada Sendero Luminoso, exigieron un millonario rescate a través de una nota manuscrita que enviaron con dos mujeres que liberaron.
El presidente de Perú, Ollanta Humala, pidió hoy tener confianza con los policías y militares que participan en la operación para liberar a los 43 trabajadores y “en el corto tiempo, poder entregarlos sanos y salvos a sus familiares”.
El Gobierno declaró el miércoles el estado de emergencia (excepción) en la provincia cuzqueña de La Convención, donde se produjo el secuestro, y envió a 1.500 militares para “aislar” a los secuestradores, a los que calificó de narcoterroristas.
Fuentes policiales del VRAE señalaron a Efe que tienen identificada una zona donde es probable que se refugian los captores con los secuestrados.
En el VRAE operan remanentes de la banda armada Sendero Luminoso y grupos de narcotraficantes.
AFP
