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viernes, 21 de diciembre de 2012

El chavismo cierra filas y sale al paso de los rumores de división en ausencia de Chávez


El chavismo, que afronta una dura prueba luego de la ausencia temporal de Hugo Chávez, líder indiscutido del Psuv y la revolución socialista, ha cerrado filas y se muestra unido para atajar los rumores que señalan enfrentamientos entre sus principales líderes.
Con el Vicepresidente Nicolás Maduro ungido como posible sucesor en caso de que Chávez, reelecto para un nuevo período en octubre pasado, no asuma el nuevo gobierno por causa del cáncer que le aqueja desde junio de 2011, los rumores sobre las aspiraciones de otros hombres fuertes como Diosdado Cabello, Elías Jaua y Rafael Ramírez han circulado con fuerza en las redes sociales, especialmente después de que Henrique Capriles señalara una presunta división dentro de la tolda roja.
El propio Hugo Chávez, antes de partir a Cuba para someterse a su cuarta operación en el último año y medio, hizo un llamado a la unidad no solo de sus fuerzas políticas, sino también del pueblo y las Fuerzas Armadas, previendo que su ausencia podría desatar una oleada de especulaciones.“Ellos están muy divididos, eso es una fachada”, dijo Capriles al cerrar su campaña por las regionales.
“Unidad, unidad, unidad (…). Que nadie se equivoque, hoy tenemos patria”, dijo un Chávez consternado y flanqueado por Maduro y Cabello.
Además las caras más visibles, Maduro y Cabello, han dejado conocer que no descartan que el Tribunal Supremo de Justicia decida sobre la posibilidad de que Chávez jure su cargo después del 10 de enero, aunque a la vez han mostrado su confianza de que el Presidente asuma en la fecha prevista, respetando el liderazgo de Chávez.
El último paso lo han dado hoy precisamente Maduro y Cabello, asegurando que en el chavismo hay “unión hermandad”, saliendo al paso a los rumores y bromeando con los motes que les habrían colocado: Joseph Stalin y Leon Trotsky.
“Nosotros estamos más unidos que nunca”, dijo Maduro, pidiendo a Cabello tomar la palabra y defender este punto.
“Algunos chulos me acusan a mí de Stalin y a Maduro de Trotsky, pero de verdad a ellos se les ve la costura. Están tratando de dividir al movimiento revolucionario, pero nosotros somos hermanos”, añadió Cabello.
Como colofón, el presidente de la AN reveló el “acuerdo” entre los líderes para enfrentar los rumores.
“Aquí llegamos a un acuerdo de que, el que venga a hablar del otro, lo sentamos los tres ymatamos la culebra por la cabeza, como debe ser”.