Las autoridades chinas estudian dar en adopción a un niño de ocho años que ha sido expulsado de su pueblo por tener el virus de inmunodeficiencia humana (VIH), informó este lunes 22 el diario chino Nuevo Beijing, en un caso que ha llegado incluso a motivar mensajes de rechazo por parte de Naciones Unidas.
Li Hui, el máximo dirigente de la comarca de Xichong, donde se encuentra el pueblo que pretende desterrar al menor, explicó al rotativo que las autoridades locales se están planteando permitir que alguna organización profesional le adopte.
Los medios chinos publicaron la semana pasada que unos 200 de los 900 habitantes de Shufangya, un pueblo de la provincia china de Sichuan (suroeste del país) habían firmado una iniciativa para expulsar al niño por ser seropositivo.
Esta iniciativa, que tenía como objetivo "proteger la salud de los vecinos", según indicaron sus promotores, levantó una gran polémica en China.
La ONU divulgó el pasado viernes un comunicado a propósito de este caso en el que dijo estar "profundamente preocupada" por la expulsión del menor y denunció que éste había sido "discriminado" y "estigmatizado".
También el Centro Nacional para el Control y la Prevención del Sida y las Enfermedades de Transmisión Sexual de China se refirió a este caso y señaló que los derechos básicos del niño deben de ser protegidos.
Después del debate que ha suscitado la expulsión del menor, las autoridades locales se están planteando retirar la custodia del niño a sus abuelos maternos, con quienes vive desde poco después de nacer, ya que su abuelo fue uno de los firmantes de la iniciativa.
La ONG AIDS Care China, que ayuda a seropositivos en el país asiático, ya se ofreció la semana pasada, al darse a conocer la noticia, a hacerse cargo del niño temporalmente.
EFE