La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), en conjunto con el Consejo de Europa y la Oficina para Instituciones Democráticas y de Derechos Humanos, urgió hoy a Hungría a evitar las políticas y prácticas que promuevan la intolerancia y el miedo y que alimenten la xenofobia contra los refugiados.
Las tres dependencias instaron a los líderes húngaros a adoptar una actitud humanitaria y ayudar a quienes se han visto obligados a abandonar sus países y que ahora buscan seguridad en Europa.
En diciembre, el gobierno de Hungría emprendió una campaña pública que muestra a las personas que huyen de guerras y conflictos como criminales, invasores y terroristas, sobre la base de sus creencias religiosas o su lugar de origen.
La campaña, que también crea una imagen negativa de los migrantes, no es la primera de este corte y durará dos meses.
ACNUR y el Consejo de Europa recordaron que como parte del sistema común europeo, Hungría debería sumarse a los esfuerzos por afrontar la mayor crisis de refugiados desde la Segunda Guerra Mundial, además de que tiene que ajustarse a sus compromisos legales según las leyes internacionales y la Convención Europea sobre Derechos Humanos.
