La Unión Europea (UE) se declaró hoy "consternada" por la ejecución de ocho reos en Indonesia acusados de estar relacionados con el tráfico de estupefacientes, a la vez que pidió a ese país establecer una moratoria de la pena capital.
"Estamos consternados por la última serie de ejecuciones en Indonesia", indicó en un comunicado un portavoz de la jefa de la diplomacia de la UE, Federica Mogherini.
La Unión Europea, como "amiga de Indonesia", urge a sus autoridades a "atender a los puntos de vista expresados por muchos en la comunidad internacional en los últimos días", y a declarar una "moratoria inmediata sobre el uso de la pena de muerte".
"Estamos dispuestos a ofrecer apoyo político y asistencia práctica para combatir el comercio de narcóticos y otras actividades delictivas que ponen desafíos a la sociedad indonesia y más allá", declaró el servicio que dirige Mogherini.
El fiscal general de Indonesia, Muhammad Prasetyo, defendió hoy la ejecución el martes de ocho convictos, entre ellos siete extranjeros, como una medida necesaria en la lucha contra el tráfico de drogas.
El brasileño Rodrigo Gularte fue uno de los ejecutados por un pelotón de fusilamiento en la isla de Nusakambangan, junto a dos australianos, tres nigerianos, un ghanés y un indonesio.
"Estamos consternados por la última serie de ejecuciones en Indonesia", indicó en un comunicado un portavoz de la jefa de la diplomacia de la UE, Federica Mogherini.
La Unión Europea, como "amiga de Indonesia", urge a sus autoridades a "atender a los puntos de vista expresados por muchos en la comunidad internacional en los últimos días", y a declarar una "moratoria inmediata sobre el uso de la pena de muerte".
"Estamos dispuestos a ofrecer apoyo político y asistencia práctica para combatir el comercio de narcóticos y otras actividades delictivas que ponen desafíos a la sociedad indonesia y más allá", declaró el servicio que dirige Mogherini.
El fiscal general de Indonesia, Muhammad Prasetyo, defendió hoy la ejecución el martes de ocho convictos, entre ellos siete extranjeros, como una medida necesaria en la lucha contra el tráfico de drogas.
El brasileño Rodrigo Gularte fue uno de los ejecutados por un pelotón de fusilamiento en la isla de Nusakambangan, junto a dos australianos, tres nigerianos, un ghanés y un indonesio.
EFE