El arquitecto chileno Alejandro Aravena, que acaba de recibir el Premio Pritzker 2016 en la ONU, puso este martes a disposición de los Gobiernos del mundo sus proyectos de viviendas de bajo costo para ayudar a la comunidad internacional a afrontar de manera sostenible el crecimiento galopante de la población urbana.
En declaraciones a la prensa pocas horas después de recibir el galardón considerado el Nobel de arquitectura, Aravena recordó que la migración a los centros urbanos es un proceso que crece en escala y velocidad y que su solución pasa más por la coordinación entre todos los sectores de la sociedad que en los fondos con que se cuente para las nuevas viviendas.
Lamentó que ante los retos actuales, el mercado, los desarrolladores inmobiliarios y las empresas constructoras sigan resistiéndose a entender que hay una necesidad urgente de cambio de paradigma.
"Mientras eso no ocurra, a nosotros nos va a seguir interesando, ver que esto se transforme … y esa es una de las razones por la cual, durante el coloquio aquí en la ONU, haremos disponibles en nuestra página web todos los planos de los conjuntos de viviendas que hemos hecho que han tenido un hecho probado por la realidad a disposición como conocimiento público"
Durante la conferencia de prensa, la responsable del Fondo para los Objetivos de Desarrollo Sostenible Paloma Durán recordó que cerca del 60 por ciento de la población mundial vivirá en áreas urbanas y que es imprescindible trabajar con el sector de los arquitectos, para afrontar el reto de la creciente urbanización.