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sábado, 17 de marzo de 2012

Fariñas reitera que el “Palidejo” fue quien ordenó el ataque en el que murió Facundo Cabral


AFP) – El atentado en el que murió el cantautor argentino Facundo Cabral en Guatemala fue ordenado por un costarricense, actualmente preso en ese país, reiteró este sábado el empresario nicaragüense Henry Fariñas en una entrevista con la radioemisora ADN de Costa Rica.
Dijo que mantiene la misma versión que dio a la Fiscalía de Guatemala, en la que señaló al costarricense Alejandro Jiménez como responsable de planear el atentado ocurrido el 9 de junio de 2011.
“Sí, sí, claro”, respondió Fariñas, en alusión a que sigue creyendo que Jiménez ordenó el ataque.
El ataque en el que Cabral falleció ocurrió mientras Fariñas llevaba al cantautor argentino al aeropuerto, tras ofrecer dos conciertos en la capital guatemalteca.
El empresario resultó herido pero logró sobrevivir y figura como uno de los principales testigos de la Fiscalía.
Fariñas aseguró que Jiménez planeó el atentado en su contra por diferencias que surgieron por la frustrada venta de clubes nocturnos en varios países de Centroamérica, de los cuales él no era el propietario.
La negociación fracasó debido a que el costarricense pretendía pagar los bienes en efectivo y la oferta por 500.000 dólares le fue denegada.
“Yo soy el que los he manejado y la decisión no era mía”, subrayó.
Reconoció que conoció a Jiménez en Guatemala, pero con el nombre de José Tremiño, y aseguró: Era “uno de nuestros mejores clientes” en los centros nocturnos que administraba.
“Sigo temiendo por mi integridad física”, dijo, pese a que recibe protección de las autoridades de Guatemala, donde permanece.
Jiménez fue detenido hace una semana en territorio colombiano y entregado a las autoridades de Guatemala el miércoles de esta semana.
El jueves asistió a una audiencia y la jueza Claudia González le impuso tres meses de prisión preventiva y el 2 de junio decidirá si eleva el caso a juicio o lo archiva.
Jiménez, probablemente vinculado al cártel mexicano de Sinaloa, era buscado también en Costa Rica por un delito de legitimación de capitales.