Desacreditar a los periodistas por su labor informativa no es una manera de solucionar los problemas que afectan a las comunidades ni de atender sus demandas, según expresó Pilar Guerra, Secretaria General del CNP Cojedes a propósito de los intentos de denigrar a los periodistas y a los medios de comunicación cuando reflejan las necesidades de los ciudadanos una vez que agotan las vías formales.
Señaló que persiste la práctica de convocar a los periodistas y luego someterlos al escarnio público al momento de formular preguntas que pueden resultar incómodas o que emplazan a dar respuestas frente a determinadas situaciones que afectan a sectores de la población. Ven al periodista como un elemento perturbador o responsable de tales situaciones, cuando el periodista no es un tomador de decisiones en los asuntos públicos.
A esta práctica se añaden las ofensas y agravios por pertenecer a determinado medio, lo cual contradice con el llamado insistente a la cobertura de eventos y al envío de notas. A pesar de ello, los ciudadanos día tras día pueden leer informaciones provenientes de las más disímiles fuentes noticiosas, en un marco de respeto a la libertad de expresión y al derecho a la información.
El periodista se debe a la verdad y a las comunidades quienes le confieren un elevado grado de credibilidad y confiabilidad cuando sus planteamientos o requerimientos son visibilizados y alcanzan ser atendidos.
En este contexto, el periodista muestra una realidad que llega a contrastarse a través del testimonio y la historia contada por las propias personas que viven a diario la problemática.
Su profesionalismo y compromiso ético moral queda develado en el tratamiento que le da a la información, a la responsabilidad de expresar fidedignamente lo contado y observado, el periodista no toma partido con juicios de valor que puedan sesgar la noticia o deformarla, por tanto, el periodista es un profesional cuyo ejercitar merece respeto, pues se formó a través de años de estudios hasta obtener las competencias que lo acreditan.
Finalmente, la representante gremial insistió en el llamado a respetar la labor periodística, respetar a los periodistas que cumplen con su función de informar oportuna y verazmente.
Pretender crear matrices de opinión tendientes a desacreditarlos no es un logro del cual jactarse, por cuanto los periodistas responsables y comprometidos siempre gozarán de credibilidad y respaldo de las comunidades y de sectores de la población que revaloran su trabajo informativo.