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martes, 30 de agosto de 2011

DEPORTES

Saladino tras la reconquista del Mundial 
 
El vigente campeón olímpico de salto en largo, el panameño Irving Saladino, intentará a partir del jueves el asalto al título mundial, que ya logró en Osaka en 2007, aunque todos apuntan como favorito a la gran sensación del año, el australiano Michael Watt.
 
Éste último, bronce hace dos años en Berlín, parece en un gran momento y su 8,44 metros de los últimos campeonatos de Australia, en el mes de abril, ya dieron muestra de su potencial, que confirmó brillantemente justo antes del Mundial de Daegu, a principios de agosto en Estocolmo (8,54 metros).

Esa distancia es la mejor marca del año y sirvió a Watt para batir el récord de Oceanía y el de Australia, en poder del medallista olímpico de plata en Sídney-2000 Jai Taurima.

Saladino, cuyo récord personal es de 8,73 metros, es segundo en el ránking 2011 con 8,40 metros, junto al zimbabuense Ngonidzashe Makusha, en una prueba a la que el defensor del título, el estadounidense Dwight Phillips, parece llegar en baja forma.
"Todo el mundo sabe que el australiano ha venido haciendo buenos resultados. Pero no estoy enfocado en él, venga a hacer mi trabajo, a ver mi resultado y vamos a ver qué sale", afirmó el panameño a la AFP en Corea al hablar de su posible duelo por la victoria con Watt.
El panameño afronta Daegu-2011 con ganas de desquitarse de los problemas de los últimos años, ya que en 2009 y 2010 no ha podido estar a su mejor nivel por las lesiones y hace dos años, en el Mundial de Berlín, quedó eliminado en la final con tres nulos.

El principal problema para Saladino de cara al asalto al título, más allá del australiano, es su estado físico, ya que a su llegada a Daegu ya dijo que no estaba al 100%, pero que confiaba poder estar en la pugna por los metales.

Entre el resto de hombres a seguir de cerca estarán el marroquí Yahya Berrabah, que consiguió un salto de 8,40 metros en Estocolmo, aunque no computa oficialmente por un viento demasiado a favor. Una semana más tarde consiguió 8,37 metros en Barcelona, esa vez sí válido para los registros anuales.

Lo que no parece probable es que el estadounidense Dwight Phillips, campeón hace dos años en Berlín, pueda revalidar su corona, ya que está en muy baja forma, con un mejor salto anual de sólo 8,07 metros, que obligó a disponer de una 'wild card' para que estuviera presente ahora en Corea.

Entre las jóvenes promesas, el ruso Aleksandr Menkov, que cumple 20 años en noviembre, cuenta con una mejor marca de 8,28 metros este años, pero está avalado por sus títulos europeo y europeo Sub-23, lo que hace que muchos le presenten como una de las grandes estrellas del futuro.

AFP