Lo Último

.

.

domingo, 13 de mayo de 2012

Mañana se reúne la zona Euro con la crisis bancaria española en la mira


(AFP) - Los problemas en Grecia para formar un gobierno de coalición, que reavivaron los temores de que el país salga de la zona euro, y el saneamiento del sector financiero español acapararán este lunes los debates de los ministros de Finanzas de la Unión Monetaria.
En un nuevo manotazo de ahogado, el presidente de Grecia, Carolos Papulias, convocó este domingo a los líderes de las formaciones conservadora (Nueva Democracia), de la izquierda radical (Syriza) y socialista (Pasok), que encabezaron las legislativas celebradas una semana atrás, para negociar la formación de un gobierno.
Ninguno de los tres partidos que obtuvieron los mejores resultados electorales pudo hasta ahora formar un gobierno de coalición. Los responsables políticos tienen ante si un dilema. Por un lado, cumplir los compromisos de austeridad que asumieron con sus acreedores, y del otro responder a su electorado, que en los comicios reflejaron su rechazo a las medidas draconianas para reducir la deuda pública.
Pero si los partidos no se ponen de acuerdo antes del martes, se convocará a nuevas elecciones para el mes de junio.
Y esa perspectiva conduciría al país a la salida de la zona euro. Ya lo advirtió el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso.
“Si los acuerdos no son respetados, esto significa que las condiciones no están reunidas para continuar con un país que no respete sus compromisos”, declaró.
El ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, también afirmó que la “zona euro puede soportar una salida” de Grecia.

La crisis de España, 4ª economía de la zona euro

Sobre todo que Grecia no es el único grave problema que tiene ante sí la zona euro y, en una pesadilla hecha realidad, ahora debe concentrarse en España, cuarta economía de la unión monetaria.
El ministro de Finanzas español Luis de Guindos deberá “explicar su plan de reformas en el sector bancario” y “justificar la nacionalización parcial de Bankia”, la mayor unión de cajas de ahorros y cuarto mayor banco del país, dijo una fuente europea.
“Deberá informarnos sobre las consecuencias de estas medidas y sus planes para garantizar” la transparencia en el sector financiero, agregó.
El gobierno español anunció el viernes un plan de saneamiento de la banca que le impone provisiones adicionales por valor de 30.000 millones de euros y aislar sus activos inmobiliarios problemáticos debido a la devaluación del mercado tras el estallido de la burbuja en 2008.
Las entidades bancarias españolas cargan con una losa de 184.000 millones de euros (unos 238.000 millones de dólares) de activos inmobiliarios de valor incierto, que representan un 60% de su cartera.
Esto provoca inquietud de los mercados sobre la salud de la economía española, especialmente después de una semana de datos demoledores.

Agoreros pronósticos para España

Un análisis de la Comisión Europeo estimó que España incumplirá no sólo la meta del déficit del 5,3% para este año sino, más grave aún, la del 3% en 2013.
Los pronósticos son un baldazo de agua fría para el gobierno conservador de Mariano Rajoy, que emprendió draconianas medidas de rigor para ahorrar 30.000 millones de euros, incluido en sectores como la salud pública o la educación, y cumplir así con sus socios europeos.
Bruselas se dio hasta el 30 de mayo para decidir si impondrá más medidas de ajuste a Madrid, o por el contrario, si extenderá hasta 2014 el plazo que le exigió para cumplir con la meta del déficit del 3%.
Pero es difícil imaginar -imposible dicen los analistas- más medidas de austeridad en un país donde los mismos datos del ejecutivo comunitario vaticinan una recesión para este año (-1,8%) este año y en 2013 (-0,3%), con un desempleo del 25,1%.
Y la misma escena de malestar social que se repite desde hace años en Grecia, se instaló en España. Decenas de miles de “indignados” salieron a las calles este sábado, dando inicio a cuatro días de movilizaciones.
“La paciencia se está agotando porque la situación económica no ha mejorado y la carga sobre las clases trabajadoras es tremenda”, afirma Bárbara, una profesora universitaria de 30 años.