El mariscal Abdel Fatah al Sisi, jefe de las fuerzas armadas y hombre fuerte de Egipto desde que derrocó al presidente islamista Mohamed Mursi, anunció este martes que no puede "ignorar" los llamamientos del pueblo para que se presente a las elecciones presidenciales.
El mariscal Al Sisi, la personalidad más popular del país, afirmó, según la agencia gubernamental MENA, que "no podía dar la espalda en el momento en que la mayoría reclama su candidatura a la elección presidencial", agregando que "se tomarán medidas oficiales en los próximos días".
Para poder presentarse a los comicios previstos este año, Al Sisi debe renunciar primero a sus cargos de viceprimer ministro y ministro de Defensa del gobierno interino instaurado por los militares, y también partir del ejército o jubilarse.
Altos responsables vinculados al mariscal dijeron a la AFP que éste abandonará sus funciones gubernamentales cuando haya sido promulgada la ley electoral que fija el marco para los comicios presidenciales. El presidente interino Adly Mansur aprobará probablemente ese texto dentro de unas dos semanas.
Al Sisi se convirtió en la figura política más popular en Egipto después de que derrocó al presidente islamista Mohamed Mursi, el primer líder electo en la historia del país.
Sus partidarios consideran que es un hombre fuerte que puede estabilizar a Egipto después de tres años de disturbios iniciados por la sublevación de 2011 que causó la caída de Hosni Mubarak, quien estuvo tres décadas en el poder.
En enero pasado, en ocasión del tercer aniversario del levantamiento de 2011 que derrocó a Mubarak -quien también provenía del ejército-, miles de partidarios del mariscal Sisi se congregaron para exhortarlo a presentarse a la presidencia. Poco después, el ejército dio un mandato a su jefe para que se presentara a la jefatura del Estado.
AFP