La contaminación del aire en China se ha reducido en el primer semestre de 2015 respecto al mismo periodo del año anterior, si bien los niveles de partículas contaminantes son “graves”, pues se sitúan muy por encima de lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud, según Greenpeace de Asia Oriental.
En un comunicado, la organización indica que la concentración de partículas PM 2,5 -las más pequeñas y más dañinas para la salud, ya que pueden penetrar directamente en los pulmones- se ha reducido en 16% de media en las 189 ciudades estudiadas en los primeros seis meses de este año comparado con los datos del año anterior.
En Pekín, en concreto, la concentración de partículas PM 2,5 cayó 15,5% interanual en la primera mitad de 2015, mientras que los niveles de dióxido de azufre (SO2) bajaron un 42,6 por ciento.
No obstante, a pesar de la caída, la situación sigue siendo “grave”, alerta Greenpeace, que ha ampliado este año su estudio del aire en 169 ciudades más y llegado a las 358.
Sobre el total de las estudiadas este año, la organización ha confirmado una media de concentración de PM 2,5 de 53,8 microgramos por metro cúbico en la primera mitad del año, cinco veces por encima de la media anual aconsejada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), 10 microgramos por metro cúbico.
Además, alrededor del 80% de estas urbes no cumplieron con los estándares nacionales anuales, fijados por el Gobierno en los 35 microgramos por metro cúbico.
Según precisó el jefe de Campaña de Clima y Energía, Dong Liansai, la principal razón de la bajada de la contaminación es la caída en el consumo de carbón, así como la entrada en vigor de la nueva ley de Protección Medioambiental de China a principios de año.
Dong destacó a Efe algunos aspectos de la ley que están teniendo grandes resultados, como el cambio en el sistema de multas a empresas contaminantes.
“Ha cambiado el cálculo, antes se multaba por incidencia y ahora la multa se multiplica por los días en que han cometido esa incidencia”, detalló.
No obstante, el experto aseguró que China se encuentra aún en una situación “de crisis” por sus altos niveles de polución.
“La calidad del aire aún está lejos de los estándares recomendados por la OMS”, insistió y consideró primordial que el Gobierno establezca un “límite de consumo de carbón a nivel nacional”.
Hasta ahora, el Gobierno chino solo ha establecido ese límite en la región norteña de Pekín, Hebei y Tianjin, si bien Dong cree que esta medida lo único que hará es “trasladar el problema a otras zonas en lugar de solucionarlo”.
Fuente: EFE