El Ministerio Público acusó a Carlos Armando Marchán (40), detenido el 15 de octubre por su presunta responsabilidad en la violación de 40 mujeres captadas en Caracas a través de redes sociales en Internet.
La fiscal 42° del Área Metropolitana de Caracas (AMC), Rosa Nelly Bueno, acusó a Marchán por la presunta comisión de los delitos de violencia sexual y prostitución forzada, previstos y sancionados en la Ley Orgánica Sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia.
En el escrito acusatorio presentado ante el Tribunal 2° de violencia del AMC, la fiscal solicitó la admisión de la acusación, de los medios de pruebas ofrecidos y pidió se ordene el enjuiciamiento de Marchán.
También se solicitó la ratificación de la medida de privativa de libertad dictada contra el hombre y que se mantenga como sitio de reclusión el Centro de Reeducación y Trabajo Artesanal La Planta, en Caracas.
De acuerdo con la investigación, Marchán fue detenido por el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), tras varias denuncias presentadas por haber participado supuestamente en la violación de 40 mujeres, con edades comprendidas entre los 17 y 25 años.
El presunto responsable realizaba la captación de sus víctimas utilizando dos modalidades, una de ellas consistía en llamar la atención a través de un sitio web, en el que ofrecía casting para modelos. Una vez contactadas, las mujeres eran citadas en los centros comerciales Chacaito y Tolón, lugares en los que supuestamente existía una oficina.
Ya en el lugar de la cita, Carlos Marchán indicaba a sus víctimas que lo esperaran en las inmediaciones de los referidos centros comerciales. Posteriormente, las invitaba a tomarse un café en un lugar adyacente, mientras que mezclaba en la bebida un sedante sin que la víctima se percatara.
De inmediato, las mujeres eran llevadas a un hotel, lugar en el que el presunto responsable procedía a ultrajarlas y tomarles fotografías para posteriormente extorsionarlas a cambio de no publicar las fotos en Internet.
La segunda modalidad que habría practicado el hombre, era fingir ser médico y así ofrecía cirugías estéticas a bajo costo a las víctimas que eran captadas en las estaciones del metro de Plaza Venezuela y Sabana Grande.
El día de la aprehensión, funcionarios del Cicpc realizaron un retrato hablado, y finalmente fue detenido en un hotel por una detective que sirvió de señuelo.
(RNV/VTV)
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