(Reuters) – El miliciano marxista Ilich Ramírez, alias “Carlos El
Chacal”, solicitó ser extraditado a Venezuela, tras ser condenado esta
semana por un tribunal francés a una segunda cadena
perpetua, dijo el domingo en una entrevista a una radio estatal local.
Francia acusa a El Chacal, de 62 años y nacionalidad venezolana, de
encabezar unos atentados con bombas hace casi tres décadas, que dejaron
un saldo de 11 muertos y unos 200 heridos.
Ramírez ha estado encarcelado en ese país por casi 20 años,
tras ser capturado en Sudán y condenado a cadena perpetua en otro juicio en que
se le acusó de matar a dos agentes de la policía y a un informante en París en
1975.
“Hay un acuerdo entre el presidente Chávez y (el expresidente francés)
Jacques Chirac de enero de 1999, confirmado por el presidente Sarkozy,
de que cuando termine el juicio yo regrese a Venezuela (…) La única
persona que puede oponerse a eso es el Jefe de Estado francés”, dijo a la
radio.
El presidente venezolano, Hugo Chávez, quien se recupera del cáncer que le
fue diagnosticado a mediados de año, ha manifestado varias veces su
apoyo a Ramírez, a quien considera un amigo desde el punto de vista
ideológico.
Un tribunal sobre terrorismo en París, integrado por siete magistrados, dijo
la semana pasada que Ramírez debe cumplir un mínimo de 18 años en
prisión como parte de su segunda condena, veredicto que retrasaría la
fecha en la que puede optar a libertad condicional, prevista originalmente para
2012 .
Abogados defensores calificaron el veredicto de escandaloso
“El Chacal”, quien fuera uno de los criminales internacionales más buscados
del mundo y que según fiscales franceses sigue siendo un peligro, alcanzó
notoriedad por un sangriento asalto a una reunión de delegados de la
Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) en 1975.
“A mí que me condenen o que no me condenen me da igual. El problema
es político, se resuelve de manera política, a pesar de que traidores
en Venezuela, corruptos que reciben comisiones y están involucrados hasta la
cabeza en cosas sucias, hacen todo lo posible por retardar mi regreso a
Venezuela”, añadió.
No quiso ofrecer detalles sobre la apelación
que introdujo su equipo de abogados después del veredicto, pero dijo tener
información de que será trasladado a una cárcel de máxima seguridad bajo duras
condiciones de reclusión.
“Un abrazo mi comandante, pa’ lante (…) Usted tiene un solo defecto:
es demasiado humano, un comandante de paracaidistas que no le gusta la
sangre. A mi tampoco me gusta la sangre, pero la sangre hay que verterla, sobre
todo la sangre del enemigo”, dijo al final de la entrevista en un mensaje
dirigido al presidente venezolano Hugo Chávez. (Reporte de Marianna Párraga.
Editado por Javier López de Lérida)