Hasta 5.000 toneladas de arena se han utilizado para tapizar las orillas del Sena, donde hoy se inauguró la playa de París, un recorrido que pretende acercar el litoral a la capital de Francia y aderezarlo con actividades náuticas y culturales para residentes y turistas.
Cursos de tai chi, explanadas para jugar a la petanca o al voleibol, kayak, vela, librerías populares y conciertos son algunas de las distracciones programadas en la décimo segunda edición de "Paris Plages", que podrá disfrutarse hasta el próximo 18 de agosto.
El recorrido estival, remedio contra la ola de calor que azota París y que amenaza con recrudecerse, se desarrolla por la vía Georges-Pompidou, a orillas del Sena, y por el Bassin de la Villete, en la vereda del canal que nutre el río de París.
Con 1,5 millones de euros de presupuesto (medio millón menos que el año pasado y 700.000 euros menos que en 2011), los organizadores esperan una afluencia de 5 millones de personas.
La iniciativa, completamente gratuita para el público, incluye además 32 conciertos en la plaza del Ayuntamiento, con actuaciones gratuitas de artistas como Olivia Ruiz o Keziah Jones, así como la posibilidad de utilizar barcas de pedales y otras pequeñas embarcaciones.
Para quienes más sufren por la crisis económica, la asociación Tous a Table (Todos a la mesa) ha desplegado un comedor solidario con menús que oscilan entre los 0,75 y los 2,5 euros por cabeza para que la falta de recursos no le quite a nadie un pequeño respiro estival entre efímeras tumbonas, árboles y palmeras instaladas a lo largo del río de París.
La edición de este año es, además, la última que inaugura quien impulsó la iniciativa hace once años, el alcalde de París, Bertrand Delanoë, que no se presentará a la reelección el año próximo.
Delanoë paseó hoy por la improvisada playa parisiense junto a la candidata socialista a sucederle y "número dos" del Ayuntamiento, la francesa nacida en Cádiz Anne Hidalgo.
EFE
