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domingo, 8 de mayo de 2011

México expresa que está "harto" de la violencia

Miles de mexicanos tomaron las calles de varias ciudades del país para manifestar por la violencia generada en la lucha contra y entre los carteles de la droga, que se ha exacerbado en los últimos años.

Se estima que alrededor de 38.000 personas han muerto desde finales de 2006, año en que el presidente Felipe Calderón inició la ofensiva contra el narcotráfico.

Este domingo, miles de mexicanos participaron en la Marcha Nacional por la Justicia y contra la Impunidad. En algunas capitales del extranjero, como Londres o París, también se celebraron concentraciones para pedir el fin de la violencia en México.

La convocatoria fue hecha por el poeta y periodista Javier Sicilia, cuyo hijo fue encontrado muerto y con signos de tortura junto a otras seis personas en el estado de Morelos (a unos 80 kilómetros de Ciudad de México).

Globos blancos, flores, banderas de México, fotos de víctimas, pancartas con mensajes como "¡Estamos hasta la madre! Alto a la guerra", "Ni un muerto más" y "No+sangre" fueron algunos de los símbolos que acompañaron a los manifestantes en Ciudad de México.

La segunda
"Ésta es la segunda gran movilización contra la violencia en un mes", recordó el corresponsal de BBC Mundo en México, Ignacio de los Reyes.

La primera, celebrada a comienzos de abril, también estuvo liderada por Sicilia.

El pasado jueves, el poeta comenzó a marchar en Cuernavaca con destino a la capital mexicana.

A lo largo del camino se unieron a él cientos de personas procedentes de distintos movimientos sociales, todos marchando en silencio y bajo el lema "Hasta la madre" (o "estamos hartos").

Está previsto que esta tarde, se reúna en el Zócalo de la ciudad con miles de manifestantes procedentes de otros puntos del país.

Según dijo el corresponsal de BBC Mundo, se espera que Sicilia haga un llamado por la regeneración del tejido social mexicano, por un compromiso de la clase política en favor de la paz y contra la estrategia del gobierno ante el crimen organizado.

El presidente mexicano dijo respetar la marcha y aseguró en un mensaje a la nación que entiende que pueda haber "desánimo" entre la población.

Sin embargo, declaró que "no es opción retirarse de la lucha". "Al contrario -dijo-, hay que redoblar el esfuerzo, porque si dejamos de luchar, ellos (los criminales) van a secuestrar, a extorsionar y matar por todo el país".

El EZLN se sumó

En el sureste del país, en San Cristóbal de las Casas, la invitación de Sicilia también tuvo una amplia acogida.

El sábado cientos de seguidores del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) salieron a protestar por lo que esa organización califica como la "campaña militar psicótica" del presidente Calderón.

"Alto a la guerra del Calderón" se leía en una de las pancartas que llevaba una de las decenas de personas que marcharon con pasamontañas en Chiapas.

Pese a las críticas, el ejecutivo mexicano insiste en que se trata del combate contra el crimen organizado, una lucha en la que el mandatario dice tener "la razón, la ley y la fuerza" de su parte.

El líder del movimiento zapatista, el subcomandante Marcos, ha denunciado el "negocio" de la guerra y ha exigido "justicia para las víctimas".

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