Irán podría responder en cualquier lugar del mundo que considere adecuado a un eventual ataque a su territorio por parte de Estados Unidos o Israel, según dijo hoy el general iraní Yahya Rahim Safavi, asesor militar del líder supremo de la República Islámica, ayatolá Alí Jameneí.
"En caso de cualquier acción militar contra Irán, la República Islámica (...) decidirá la localización geográfica del campo de batalla", señaló Safavi a la agencia local Fars, en referencia a las recientes advertencias de personalidades estadounidenses e israelíes de atacar Irán debido a su programa nuclear.
Safavi repitió la sentencia de diversas autoridades iraníes, que han dicho que su respuesta será "aplastante" si son atacados y han apuntado acciones bélicas contra territorio israelí, en especial la planta nuclear de Dimona, centro de su programa atómico, y contra bases y buques de la Armada de EEUU en la región.
Además, los iraníes han dicho que, de verse ante un ataque exterior, podrían cerrar el estrecho de Ormuz, la boca del golfo Pérsico, y cortar la salida por esa vía de casi un tercio del petróleo que alimenta al mundo, lo que podría ocasionar una hecatombe de consecuencias impredecibles.
Dentro de la escalada de declaraciones belicistas ocasionadas por la disputa sobre el programa nuclear de Irán, que Washington, Tel Aviv y otros gobiernos aseguran que tiene una dimensión militar, mientras Teherán lo niega, otro general iraní ha amenazado hoy con formar un ejército de 100 millones de voluntarios islámicos para "liberar Jerusalén".
El general Mohammad Reza Naqdi, comandante de la Fuerza de Voluntarios Islámicos (Basij) de Irán, una fuerza juvenil utilizada por el régimen teocrático iraní sobre todo para acciones callejeras, dijo hoy a Fars que estudian la formación de ese ejército musulmán.
Naqdi, uno de los militares que realiza las declaraciones más beligerantes en Irán, dijo: "Vamos a formar la fuerza de 100 millones de basij del mundo musulmán para hacer realidad la promesa del imán (Ruhola) Jomeini (fundador de la República Islámica) de liberar Jerusalén".
La publicación de un informe, el pasado 8 de noviembre, por el secretario general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Yukiya Amano, que aseguraba que disponen de indicios de que Irán ha trabajado recientemente en el desarrollo de bombas atómicas, ha puesto a Irán en el centro de una tormenta mundial.
La Junta de Gobernadores del OIEA aprobó el pasado viernes una moción, elaborada por Alemania, China, Francia, EEUU, Reino Unido y Rusia, en la que muestra su "profunda y creciente preocupación" por los indicios de que Irán trabaja para desarrollar bombas atómicas.
Irán ha negado tajantemente que tenga intención de fabricar bombas atómicas y, al mismo tiempo, ha afirmado que no renunciará a sus derechos y su programa de investigación nuclear pacífico, destinado a producir electricidad e isótopos radiactivos para uso médico.
Algunas personalidades de EEUU, Israel y el Reino Unido han apuntado en las últimas semanas la posibilidad de atacar instalaciones nucleares iraníes, mientras otros países apoyan la posibilidad de imponer nuevas sanciones a Teherán para que abandone su programa nuclear.
EFE