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viernes, 25 de marzo de 2011

Huelguistas seguirán "en pie de lucha" hasta lograr sus 5 objetivos

La vocera de los 52 estudiantes en huelga de hambre, Gaby Arellano, ratificó que sólo levantarán su protesta cuando el presidente Hugo Chávez y la Ministra Yadira Córdova cumplan sus exigencias. Recordó que su "dignidad no se negocia" y que siguen firmes en sus objetivos. "No negociamos, que se nos cumplan los 5 objetivos o nos quedamos aquí en pie de lucha. Los 5 objetivos se cumplen o se cumplen", enfatizó.

Arellano dijo que el Gobierno sabe "muy bien cuál es el estado de salud de los huelguistas" y advirtió que "cada vez que nos atacan y descalifican la dignidad sigue más alta".
Por su parte, el presidente de la FCU de la UCV, Diego Sharifker se respondió al canciller Nicolás Maduro por su pronunciamiento de esta mañana en el estado Bolívar: "si se quieren coser lo que se quieran coser, que se lo cosan".

"Bachiller Nicolás Maduro, porque el ni siquiera fue universitario, no tenemos miedo. Si alguien se va a suturarse acá serán los universitarios", señaló el joven.

La mañana de este viernes, la estudiante de 18 de la UCV, Gabriela Torrijos se cosió la boca, luego de vencerse el plazo de 12 horas que le dieron al Gobierno para que se pronunciara. “Hoy usted le ha demostrado al país entero que no tiene corazón”, le dijo Torrijos a la ministra de Educación Superior Yadira Córdova.

Torrijos aseguró que los huelguistas siguen con la misma fuerza la protesta y las mismas ganas de luchar.

Con Torrijos son cuatro los jóvenes en la sede del PNUD que se han cosido la boca.

La madre de Gabriela Torrijos, Marisa Fariña, se dirigió al presidente Hugo Chávez y a la ministra Yadira Córdova, una vez que la joven cosió sus labios. "Las peticiones de estos muchachos son total y absolutamente justas y este Gobierno es sordo. Me dirijo a usted Ministra que es mujer, que es madre y a usted Presidente que es padre: busquen una solución a este conflicto, por favor, pronúnciense", pidió.

Calificó de "dura" la experiencia, de ver a su hija llegar a esos extremos para ser escuchadas.

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