El ministro de Economía, Luis de Guindos, dio cuenta este martes en el Congreso del resultado provisional de los análisis de supuestas operaciones irregulares en las entidades nacionalizadas. En las 42 pruebas forensic ya terminadas el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) estima que se habría producido un "quebranto" a las entidades de unos 2.600 milones. El FROB ya había precisado que en las últimas 23 pruebas, referidas a Catalunya Banc y NCG Banco, ese perjuicio habría sido de 1.500 millones
El ministro recordó que el FROB se había personado en 19 causas penales, "la mayoría iniciadas" por el propio fondo estatal. "Estas operaciones analizadas hacen referencia, en su mayoría, a irregularidades en la concesión de créditos, que han perjudicado a las entidades, y, en algunos casos, han beneficiado a los gestores de esa entidad", añadió Guindos.
La comparecencia de Guindos ante la comisión de Economía del Congreso, a petición propia, tenía por objeto evaluar los resultados de las entidades españolas en las pruebas del Banco Central Europeo, publicadas este domingo. Tras calificarlos de "muy satisfactorios", consideró que "la banca española está en condiciones de contribuir a la recuperación de la economía aumentando el crédito a familias y empresas".
Guindos recalcó que todas las entidades españolas, salvo Liberbank, aprobaron las pruebas del BCE. Y que en este último caso, el banco ya había captado este año el capital necesario (640 millones) para compensar "muy holgadamente" el déficit de 32 millones revelado por las pruebas del supervisor financiero. El ministro destacó además que en la revisión de la calidad de los activos, la banca española es la que sale mejor parada entre los 19 países analizados.
"Esta situación era impensable hace dos años y medio, nuestro esfuerzo ha dado resultado", proclamó Guindos, antes de referirse a las medidas del Gobierno (aumento de las provisiones, fortalecimiento del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria, petición del rescate europeo a la banca, o creación de la Sareb, el banco malo) que habrían contribuido a esa situación. Aquí, el portavoz del PSOE en la Comisión, Juan Moscoso, le afeó que no hiciera alusión "a otra cifra" : los casi 63.000 millones de dinero público invertido en sostener a la banca quebrada. "Es nomal que los bancos no estén estresados, los estresados somos nosotros, tras cinco años de ayudas a la banca de todo tipo", insistió Alberto Garzón, diputado de IU.
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