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martes, 16 de agosto de 2011

Unicef critica educación en Chile

(dpa) - El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) criticó este martes la segmentación y segregación del sistema educacional chileno, durante la toma de su sede en Santiago.

“Chile tiene uno de los sistemas de educación más segmentados de América Latina y de hecho, más segmentados del mundo”, dijo el representante de la agencia multilateral en Chile, Gary Stahl.

“Esto qué quiere decir: que si uno es pobre (en Chile) recibe una pobre educación, si es rico recibe una excelente educación”, insistió el funcionario.

Las declaraciones ocurrieron luego que un grupo de 70 artistas tomaran la sede de Unicef en Santiago de Chile, en apoyo a escolares en huelga de hambre que exigen educación pública gratuita y de calidad en este país sudamericano

El vocalista del grupo Illapu, Roberto Márquez, dijo que con su acción quieren exigir al gobierno que reaccione ante las protestas estudiantiles que ya suman tres meses. “Hay estudiantes en huelga de hambre ante la indiferencia insoportable del gobierno frente a lo que pasa hoy día en nuestro país”, dijo el músico.

“Hay 23 huelguistas que tienen entre 16 y 18 años y sentimos que el gobierno sigue jugando”, sostuvo el artista.

Los estudiantes, que exigen el fin del lucro en la educación escolar y universitaria, movilizaron a millones de personas las últimas semanas en marchas y caceroleos.

En Chile, desde la dictadura militar, gran parte de la educación escolar es paga y la formación universitaria, con mensualidades que alcanzan hasta los mil dólares.

La huelga estudiantil, en un año donde cientos de miles de chilenos marcharon también por demandas ambientales y civiles, está cruzada por un amplio rechazo a todas las élites políticas, según coinciden encuestas de todo signo.

La situación social y política, que todos los sectores coinciden en calificar como una crisis de representación, está ligada a la inequitativa distribución del ingreso en Chile, la mitad de los hogares vive con ingresos mensuales de unos 1.000 dólares, al tiempo que las diez familias más ricas, incluida la de Piñera, poseen un patrimonio de 75.000 millones de dólares.