Una comisión nombrada por el gobierno indio en la región de Cachemira informó del hallazgo de más de 2.000 cadáveres enterrados en fosas comunes en los últimos 20 años.
El jefe de la comisión de derechos humanos Bashir Ahmad Yatoo, le dijo a la BBC que en total se encontraron 2.156 cuerpos, la mayoría de ellos con heridas de bala que fueron entregados por la policía a los vecinos de área para que los enterrasen.
Según la policía, los fallecidos eran militantes sin identificar.
Grupos de derechos humanos habían acusado previamente a las fuerzas de seguridad indias de matar a personas inocentes.