La entrada a Trípoli no fue un paseo, sino una batalla sangrienta. El régimen habla de 1.300 muertos en 24 horas.
Pero, luego, las fuerzas rebeldes no han encontrado resistencia dentro de Trípoli, que ya se preparaba para la caída del régimen.
Muamar el Gadafi ordenó que se abran los depósitos de armas y arsenales de Trípoli a los ciudadanos, para que estos defiendan la capital.
En un mensaje de audio dijo: "Abrid los almacenes de armas, entregadlos a las masas. ¿Dónde están los religiosos que siempre están en primera fila y buscan el martirio? ¡Que salgan de sus casas para limpiar Libia de las ratas!", exclamó, y recordó que "en este momento se está armando a las familias".
Nada de eso ocurrió.
Más tarde, los rebeldes afirmaron que toda Trípoli ya estaba bajo su control a excepción del complejo de Bab Al Aziziya, donde se refugiaba el mandatario libio, Muamar el Gadafi, según han indicado sus portavoces a la televisión Al Jazeera.
Luego de la medianoche libia, se informó que Muamad el Gadafi se ha rendido a los rebeldes, según el Consejo rebelde.
Pero el dictador lanzó algo así como un mensaje de auxilio grabado: "Es una cuestión de vida o muerte, hay que salvar Trípoli".
La plaza de la Libertad en Bengasi, la capital rebelde, se llenó de libios celebrando el derrumbe del régimen de Gadafi, según mostró Al Jazeera.
El sonido de los combates se trasladó a los alrededores de la residencia de Gadafi, según Al Jazeera.
La oposición, que celebraba ya la caída de Trípoli en las calles de Begasi y otras ciudades, también ha apuntado que estarían dispuestos a negociar con el todavía líder libio si este rinde finalmente.
Poco después se conoció que el mandatario libio, Muamar Gadafi, ha sido detenido, según una portavoz del Tribunal Penal Internacional (TPI).
La fuerza personal del líder libio se ha rendido y ha depuesto las armas, según ha informado la cadena Al Jazeera, que también especula sobre la presencia en el aeropuerto de la capital de 2 aviones de Sudáfrica que podrían evacuar a Gadafi y su séquito de Libia.
2 de los hijos del coronel, Seif el Islam y Saadi, están bajo la custodia de las fuerzas rebeldes, aunque la cadena CNN demoraba en confirmarlo.
Pero, luego, las fuerzas rebeldes no han encontrado resistencia dentro de Trípoli, que ya se preparaba para la caída del régimen.
Muamar el Gadafi ordenó que se abran los depósitos de armas y arsenales de Trípoli a los ciudadanos, para que estos defiendan la capital.
En un mensaje de audio dijo: "Abrid los almacenes de armas, entregadlos a las masas. ¿Dónde están los religiosos que siempre están en primera fila y buscan el martirio? ¡Que salgan de sus casas para limpiar Libia de las ratas!", exclamó, y recordó que "en este momento se está armando a las familias".
Nada de eso ocurrió.
Más tarde, los rebeldes afirmaron que toda Trípoli ya estaba bajo su control a excepción del complejo de Bab Al Aziziya, donde se refugiaba el mandatario libio, Muamar el Gadafi, según han indicado sus portavoces a la televisión Al Jazeera.
Luego de la medianoche libia, se informó que Muamad el Gadafi se ha rendido a los rebeldes, según el Consejo rebelde.
Pero el dictador lanzó algo así como un mensaje de auxilio grabado: "Es una cuestión de vida o muerte, hay que salvar Trípoli".
La plaza de la Libertad en Bengasi, la capital rebelde, se llenó de libios celebrando el derrumbe del régimen de Gadafi, según mostró Al Jazeera.
El sonido de los combates se trasladó a los alrededores de la residencia de Gadafi, según Al Jazeera.
La oposición, que celebraba ya la caída de Trípoli en las calles de Begasi y otras ciudades, también ha apuntado que estarían dispuestos a negociar con el todavía líder libio si este rinde finalmente.
Poco después se conoció que el mandatario libio, Muamar Gadafi, ha sido detenido, según una portavoz del Tribunal Penal Internacional (TPI).
La fuerza personal del líder libio se ha rendido y ha depuesto las armas, según ha informado la cadena Al Jazeera, que también especula sobre la presencia en el aeropuerto de la capital de 2 aviones de Sudáfrica que podrían evacuar a Gadafi y su séquito de Libia.
2 de los hijos del coronel, Seif el Islam y Saadi, están bajo la custodia de las fuerzas rebeldes, aunque la cadena CNN demoraba en confirmarlo.
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