El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, consideró “serio” el incidente con la Argentina por la retención en febrero de parte del material bélico y de comunicaciones que envió Washington para un entrenamiento de la Policía Federal argentina y reclamó la devolución de la carga decomisada.
“Ellos tienen algunos de nuestros equipos de comunicación. No hay razón para no devolverlos. Y la próxima vez que vea a la presidenta (Cristina Fernández de) Kirchner le voy a preguntar: ‘¿Podemos recuperar nuestro equipamiento?’”, declaró Obama en una entrevista con un periodista de “The Miami Herald” y columnista de “La Nación” de Buenos Aires publicada hoy.
Obama negó en tanto que el portavoz del Departamento de Estado norteamericano haya sobreactuado al calificar el caso del avión como un “incidente serio”.
“No, es serio en el sentido de que la Argentina ha sido históricamente un amigo y un socio de los Estados Unidos”, sostuvo el mandatario norteamericano.
Aclaró no obstante que “no va a ser un aspecto decisivo de la relación Estados Unidos-Argentina”.
Obama hizo estas declaraciones al periodista Andrés Oppenheimer, que escribe para “The Miami Herald” y “La Nación”, durante su visita a El Salvador, en el cierre de la gira latinoamericana que incluyó escalas en Brasil y Chile, pero no en la Argentina, un hecho que generó malestar en las autoridades en Buenos Aires.
El entredicho con Estados Unidos al que se refiere Obama ocurrió el 10 de febrero pasado, cuando arribó a Buenos Aires una aeronave de la Fuerza Aérea estadounidense con material bélico y de comunicaciones destinado a un curso de entrenamiento para grupos de elite de la Policía Federal argentina, que había sido acordado por las autoridades de ambos países.
La Aduana argentina halló artículos que no estaban incluidos en la lista del cargamento presentado por Estados Unidos y se los incautó, desatando un incidente diplomático con Washington.
El gobierno argentino presentó una protesta formal a Washington, en la que solicitó “explicaciones satisfactorias que aclaren la presencia de material no declarado en el cargamento que llegó al Aeropuerto de Ezeiza, así como también el uso que se le pretendía dar una vez ingresado al país, teniendo en cuenta que parte del material se trataba de elementos que se utilizan en operaciones de inteligencia y/o comunicaciones”.
El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, precisó en su momento que entre el material incautado se hallaron “armas y drogas, varias dosis de morfina, material para interceptar comunicaciones, GPS muy sofisticados, elementos tecnológicos con códigos secretos y un baúl completo con drogas medicinales vencidas”.
La Justicia argentina cerró la causa que investigaba presuntos delitos y el tema quedó en manos de la Aduana argentina, que no resolvió aún si devolverá la carga a su lugar de origen.
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