Nuestra vida está rodeada de números que son útiles para realizar operaciones tan cotidianas, pero recordarlos puede convertirse en una tarea difícil. Cómo podemos combatir el olvido y cuál es el mejor método para recordar tantas cifras.
"Si quiere memorizar cosas complejas, eso solo funciona por asociaciones. Lo mejor es siempre recordar dos cosas juntas", explicó el epileptólogo de la Clínica Universitaria de Bonn, Christian Elger.
"Si tiene que hacer las compras, entonces cierre los ojos e imagínese que está limpiando. Inmediatamente empezará a recordar los utensilios que necesita para limpiar y sobre todo aquellos que le faltan y necesita comprar", agregó a manera de ejemplo.
El alemán Gert Mittring, ocho veces campeón mundial de cálculo mental, también se vale de estas asociaciones para recordar complejas combinaciones numéricas. "Lo importante es relacionar los hechos con los conocimientos propios, pasatiempos e intereses especiales", comentó.
La afición de Mittring son los números, de allí que relaciona hechos importantes con características numéricas. "Si tengo que recordar el 251, por ejemplo, sé que se trata del número primo más pequeño, mayor que la cuarta parte de 1000", indicó, sin embargo reconoció que su método es poco práctico.
En su nuevo libro "Rechnen mit dem Weltmeister" ("Haciendo cálculos con el campeón mundial"), Mittring enseña lecciones más útiles. Si se trata de recordar una combinación de números como 047, el campeón mundial recomienda el método siguiente.
El cero le recuerda un huevo duro, el cuatro lo asocia con un trébol de cuatro hojas y el siete con los siete enanitos. El siguiente paso es combinar todas estas asociaciones entre sí en un pequeño cuento, que podría sonar así: El huevo duro se encuentra posado en un trébol de cuatro hojas y rodeado por los siete enanitos.
El conectar hechos con emociones también permite recordarlos más fácilmente y de modo duradero."Este método lo aplicamos de modo inconsciente. Recordamos mejor las cosas que tienen gran valor emocional para nosotros, como nuestra boda, un cumpleaños o también hechos tristes, como el 11 de septiembre del 2001", indicó el profesor Elger.
Ambos expertos alemanes coincidieron en que pequeños desafíos diarios son la mejor manera de entrenar el cerebro, según difundió la página dw.de.
"Lo mejor es mantenerse en actividad . Quien reposa se herrumbra. Un modo de entrenarse es leer textos exigentes y discutir luego sobre el contenido", aconsejó el epileptólogo.
PRI