La encuesta entre más de 60 economistas también estimó que la tasa de desempleo de la zona euro, ya en récord máximos, tiene más espacio para aumentar y probablemente tocará un pico a fin de este año y comienzo del 2014.
La mayoría de los analistas consultados la última semana espera que la zona euro logre escapar de la recesión este trimestre -aunque por poco-, mientras que prevén que el crecimiento se ubique apenas por encima de cero al menos por el próximo año.
Con todo, la economía de la zona euro parece estar encaminada a terminar el año con un menor tamaño, según la estimación promedio de una contracción del 0,4 por ciento. Eso contrasta fuertemente con el crecimiento en Estados Unidos, que se espera que promedie el 2,0 por ciento en el 2013.
Lo peor para la zona euro es que el crecimiento que tiene está siendo respaldado por Alemania, que se espera que se expanda modestamente. Las otras grandes economías -Francia e Italia- están en retroceso.
Diecinueve de un total de 25 economistas que respondieron una pregunta adicional dijeron que esperaban que el Banco Central Europeo anuncie más medidas para combatir la desaceleración.
"La falta de crecimiento y el desempleo récord, combinados con mayores recortes de gastos y un deterioro del crédito (...), presenta un riesgo real para el futuro de la zona euro", dijo Lena Komileva, economista jefe de G+ Economics en Londres.
El sondeo mostró que la tasa de desocupación alcanzará el 12,4 por ciento a fin de año, comparado con el 12 por ciento previsto en febrero.
Las sugerencias más populares para nuevas medidas del BCE fueron la de un programa para impulsar créditos a pequeñas y medianas empresas y una nueva ronda de préstamos a tres años a bajo costo a los bancos.
El motor alemán
Sólo cuatro de 37 economistas esperan que la recesión en la zona euro persista en el trimestre actual, lo que quizá sorprenda debido a cuán pocas señales de mejora han mostrado recientemente los sondeos de negocios.
Pero ese consenso depende de que no se han registrado grandes saltos en la crisis de deuda soberana, que ya ha quitado a cinco países de la eurozona la capacidad de financiarse a sí mismos.
El hecho de que la euro zona quizá pueda salirse de la recesión es una reflexión puramente ligada a la relativa fortaleza de Alemania, más que a una señal de que el bloque en su conjunto esté regresando a la prosperidad.
Para todo el año se espera que la economía más grande de Europa y su motor, resistente a la crisis de la zona euro, registre un crecimiento moderado del 0,6 por ciento debido a que el consumo privado sigue cauto y las importaciones superan a las exportaciones.
La economía alemana crecerá más aceleradamente el año que viene, a un 1,7 por ciento, según sugirió el sondeo, en base a que alzas salariales y un menos desempleo alentarán el consumo privado.
Los pronósticos consensuados de crecimiento alemán para el 2013 y el 2014 se mantuvieron sin cambios desde el sondeo anterior de febrero.
La historia es completamente distinta para Francia, cuyas estimaciones de crecimiento fueron reducidas a la baja recientemente por el Gobierno, lo que coloca las metas de recorte del déficit en riesgo nuevamente después de que se abandonara el objetivo inicial del 2013.
Y la recesión que está calando en la tercera economía de la zona euro, Italia, probablemente se profundizará más de lo previsto anteriormente y la deuda crecerá a un nuevo récord.
Las estimaciones del sondeo llegaron en momentos en que el estancamiento político continúa en Italia, luego de unos indefinidos comicios nacionales que no dejaron a ningún partido en condición de formar Gobierno.
Un consenso entre más de 20 economistas encuestados proyecta una contracción del 1,5 por ciento en la tercera economía de la región para este año, luego de una caída oficial del 2,4 por ciento en el 2012.
En tanto, se prevé que la deuda pública, que tocó un máximo histórico del 127 por ciento de la producción en el 2012, trepe al 129,8 por ciento este año.
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