Para dentro de cuatro días está previsto el matrimonio del príncipe Guillermo y su novia Kate Middleton, considerada la “boda del siglo”, pero antes que esto ocurra estalló un escándalo que podría poner en aprietos al hijo de la recordada Lady Di.
Se trata de unas fotografías en las que se ve al heredero de la Corona Británica en ropa interior, recién salido de la piscina, y en las que además aparece una mujer colocándole una especie de guirnaldas de colores en la cintura.
Las imágenes fueron tomadas en diciembre del año 2002, durante una fiesta a la que asistió Guillermo con motivo del cumpleaños de su amigo James Tollemache, hijo de un Lord.
El tabloide británico The People ha revelado el “escándalo real” más sonado que se haya conocido del que parecía el más centrado y serio de los nietos de la reina Isabel II.
"Guillermo se lo estaba pasando realmente bien, y esas fotos muestran cómo no tenía reparos. No le importó quitarse la ropa. Es increíble pensar que es el futuro rey de Inglaterra", declaró un asistente a dicha celebración.
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